04/11/2025
No hay nada más doloroso que mirar para atrás y darte cuenta que no fue la vida la que te dijo que no, fuiste vos.
Nos llenamos de excusas lógicas: “no es el momento”, “no tengo tiempo”, “no sé por dónde empezar”. Pero en el fondo es miedo a fallar, a hacer el ridículo, o a no ser suficiente.
¿Pero sabés qué? El miedo se pasa cuando tomamos acción.
No importa si lo hacés perfecto, si te sale bien a la primera o si tenés miedo mientras lo hacés. Lo único que importa es que lo intentes.
Porque nadie se arrepiente de haberlo intentado. Pero sí, y mucho, de no haberlo hecho.
¿Hay algo que todavía no te animaste a hacer?
Es ahora. Porque si no es ahora ¿cuándo?
Seguime para más contenido que te impulse a animarte.