
21/11/2024
Concédete permiso de ser quien eres, en lugar de esperar la aceptación de los otros.
Concédete permiso de sentir lo que sientes, aunque no tengas la aprobación de los demás.
Concédete permiso de pensar como piensas y de equivocarte las veces que sea necesario hasta aprender.
Concédete permiso de correr riesgos grandes, raros, costosos o insignificantes, pero siempre los que decidas conforme a tus metas.
Concédete permiso de decir lo que crees aunque eso suponga ir contracorriente.
Concédete permiso de expresar tu verdad, tus deseos, tus convicciones porque ellos te determinan.
Concédete permiso de no estar de acuerdo con la mayoría, porque no siempre lo que aprueban todos es lo correcto.
Concédete permiso de renunciar cuando te des cuenta que hay personas y momentos que no te permiten crecer.
Concédete permiso de hacer silencio y guardar tus palabras cuando no son comprendidas.
Concédete permiso de vivir como te parezca, con los aciertos y con los errores, con las veces que seguiste tu camino y con las otras tantas que pusiste reversa.
Y por sobre todo, concédete permiso de elegir con quien quieres compartir tus permisos y a quien no le otorgas en tu vida el permiso de quedarse.
Viviana Baldo - Permitido Noviembre (2016)