01/10/2025
El precandidato presidencial del Pacto Histórico se refirió a la creciente tensión dentro del Gobierno Nacional luego de que varios ministros y altos funcionarios renunciaran a sus visas de Estados Unidos en solidaridad con el presidente Gustavo Petro.
El debate surgió después de que el Departamento de Estado cancelara este documento al ministro de Minas, Edwin Palma; a la directora del Departamento Administrativo de la Presidencia (Dapre), Angie Rodríguez, y más recientemente al ministro de la Igualdad, Juan Carlos Florián. Todos fueron notificados mediante correo electrónico.
En respuesta, el secretario jurídico de Presidencia, Augusto Ocampo, decidió renunciar voluntariamente a su visa, gesto al que se sumaron la canciller Rosa Villavicencio, el ministro de Hacienda, Germán Ávila, y la superintendente de Industria y Comercio, Cielo Rusinque.
El presidente Petro respaldó estas decisiones al afirmar: “Nos llena de orgullo no tener la visa de un país, cuyo gobierno apoya un genocidio”. Por su parte, el ministro del Interior, Armando Benedetti, quien no cuenta con visa desde hace años, planteó que todo el gabinete debería prescindir de ella en solidaridad con el jefe de Estado.
Estas posiciones han generado un ambiente complejo dentro de la administración, pues, según analistas, la postura presidencial podría interpretarse como una línea de conducta obligatoria para sus funcionarios. La división estaría marcándose entre quienes aún conservan la visa estadounidense y quienes han decidido rechazarla o ya la perdieron, en medio de un mensaje de cohesión que busca mostrar un Ejecutivo sólido frente a Washington.
