29/08/2025
En el cantón fronterizo de Macará, ubicado en la provincia de Loja, Ecuador, existe una tradición de más de 35 años: los cambiadores de moneda ambulantes, conocidos localmente como “soleros”. Estas personas han desempeñado un papel crucial en la economía local, facilitando el intercambio de divisas entre Ecuador y su vecino del sur, Perú. Sin embargo, no fue sino hasta 1992 que su actividad fue formalmente reconocida a través de la legalización de la Asociación de Cambiadores Ambulantes.
Desafortunadamente, la inseguridad es una constante en la vida de estos trabajadores. En los últimos años, varios miembros de la asociación han sido víctimas de violentos asaltos en los alrededores del Mercado Municipal de Macará, específicamente en el parque Carlos Román Hinostroza, ahora apodado el “Parque de los Soleros”.
El 30 de marzo de 2023, tres integrantes de la asociación fueron asaltados a mano armada. Dos años después, el 11 de julio del presente año, uno de esos mismos miembros fue nuevamente atacado, sufriendo graves lesiones físicas que requirieron atención médica de emergencia. Apenas un mes después, el 4 de agosto, otro integrante fue asaltado, y en un hecho impactante, volvió a ser víctima de otro robo solo 24 días después.
A pesar de los constantes peligros, los soleros siguen siendo un pilar fundamental en la economía de Macará. Su trabajo no solo facilita los intercambios comerciales con Perú, sino que también dinamiza la economía local, atrayendo a turistas y comerciantes. Estos valientes trabajadores son una pieza clave para mantener viva la frontera y el intercambio cultural y económico entre los dos países.
Este sector, aunque enfrenta desafíos significativos, continúa demostrando su importancia y resiliencia en el día a día del cantón Macará. La comunidad espera que se implementen medidas de seguridad más efectivas para proteger a estos valiosos trabajadores y garantizar un entorno más seguro para todos.