06/08/2025
🧵
LA DE LAS DE :
¿POR QUÉ FUERON POR EL ALUMINIO Y EL TEFLÓN.?
1️⃣ Durante siglos, la olla de barro fue el alma de la cocina tradicional.
Con ella se cocinaba lento, parejo y sin tóxicos.
Frijoles, moles, atoles, caldos… sabían diferente: más profundos, más vivos.
2️⃣ El barro no era solo un recipiente.
Era parte de la medicina ancestral.
Bien curado, libera minerales como hierro, calcio y magnesio al alimento.
3️⃣ Pero llegó el siglo XX, y con él la industria del “progreso”.
El aluminio, el acero esmaltado y luego el teflón fueron vendidos como modernos, seguros y prácticos.
El barro fue tachado de “atrasado”, “poco higiénico”, “cosa de pobres”.
4️⃣ Lo que no contaron:
🔸 El teflón libera gases tóxicos a altas temperaturas.
🔸 El aluminio, al desgastarse, puede filtrarse en la comida.
Estudios (Exley, 2013; Krewski et al., 2007) lo asocian con daños neurológicos y enfermedades degenerativas.
5️⃣ Mientras tanto, la olla de barro —hecha a mano y con tierra viva— nunca necesitó químicos para ser útil.
Solo respeto: curarla bien, cocinar a fuego lento y tratarla como herencia.
6️⃣ Nos hicieron creer que lo brillante era mejor.
Que lo “rústico” era sucio.
Pero no todo lo nuevo es avance.
Mucho se perdió cuando cambiamos utensilios vivos por metales sin alma.
7️⃣ Hoy, muchos hogares y chefs están volviendo a la cazuela de barro.
Por salud. Por sabor. Por reconexión con la tierra.
8️⃣ :
El barro cocina con .
Y lo que el alma, también el .
Volver a nuestras raíces no es retroceder.
Es recordar lo que el marketing nos hizo olvidar.