26/05/2025
Siempre Lemmy
Una vez Lemmy fue rechazado en su propio concierto por no tener entrada
Durante una gira de Motörhead en los años 80, Lemmy llegó temprano a uno de sus propios conciertos en Londres, vestido con su típico atuendo de cuero y sombrero. Se acercó a la puerta trasera del recinto, como solía hacer, para entrar antes del show. El guardia de seguridad, que no lo reconoció de inmediato (quizá por las gafas oscuras o por no esperar que el mismísimo Lemmy llegara solo), le impidió el paso:
—“¿Tienes boleto?”
—“Soy Lemmy.”
—“¿Y yo soy Elvis. A ver, enséñame tu pase.”
Lemmy, en lugar de molestarse, se rió, sacó una botella de Jack Daniel’s de su chaqueta, le ofreció un trago al guardia y esperó a que alguien del equipo lo reconociera. Cuando finalmente lo dejaron pasar, el guardia quedó boquiabierto. Lemmy, en lugar de enojarse, simplemente dijo:
—“Buen trabajo. Ojalá todos los guardias fueran así de estrictos.”
Esa anécdota se volvió leyenda en la escena musical británica y muestra la humildad y el humor de Lemmy, además de su amor por el whisky y la buena actitud.