16/08/2025
Las calles de inundaron de vino para disfrute de miles de jóvenes principalmente
Jumilla pone fin a las fiestas de la Vendimia con la tradicional Gran Cabalgata del Vino, que partía a las 6 de la tarde por su recorrido habitual: Avenida de Reyes Católicos, Avenida de Murcia, Cánovas del Castillo, Glorieta y Avenida de Levante para finalizar en la plaza del mercado de Abastos. Las calles de la localidad quedaban impregnadas del néctar de la uva, que ya se empieza a recolectarse en la Denominación de Origen Protegida Jumilla.
Todos quedaron empapados de vino (locales y visitantes), vino por todas las partes del cuerpo.
Desde primera hora de la mañana las plazas y zona céntricas de Jumilla se llenaron de gente en una auténtica riada que más tarde convierte sus calles en auténticos ríos de vino. Es como la tomatina de Buñol, pero en esta ocasión utilizando más de 80.000 litros de vino que son derramados con, botellas, sulfatadoras, pistolas de agua (en este caso de vino) o cubos.
Al público, en su mayoría joven, le va la marcha y la fiesta y, acuden de todos los alrededores de Jumilla que nunca faltan a esta cita con la bacanal del vino: Yecla, Cieza, Abarán o los municipios manchegos de Hellín, Ontur, Fuenteálamo o Tobarra, junto al alicantino Pinoso; Se dejan de ver algunos españoles e incluso extranjeros en esta fiesta que tiene público a favor y detractores.
Los locales comerciales de las calle por donde transcurre la cabalgata colocan plásticos para evitar daños en las fachadas por las manchas de vino.
Han participan unas 4.000 personas ataviadas con el traje típico de Jumilla repartidos en 20 peñas con un único mensaje al visitante o persona que acude a la fiesta: nadie puede irse sin bañarse en vino.
Desde las cuatro y media de la tarde, un centenar de personas entre agentes de Policía Local, Guardia Civil, Protección Civil y servicios sanitarios formaban un preventivo especial de seguridad, puesto en marcha por el Ayuntamiento de Jumilla ya que la población se quintuplica durante estas fiestas y hay que garantizar su seguridad.
La gente ya viene preparada para la fiesta y lleva consigo, en sus vehículos, un segundo equipaje para cambiarse una vez finaliza la Gran Cabalgata del Vino. La ropa utilizada en la Cabalgata del Vino tiene que ser para tirar ya que queda inservible.
¡Que viva la Gran Cabalgata del Vino de Jumilla¡, que nadie se vaya sin mojarse de vino de la ciudad ese es el lema.
Al acabar el desfile de carrozas, que dura más de cuatro horas, los participantes se asean improvisadamente para así poder seguir paseando por la Feria y Fiestas de Jumilla 2025 que concluyen este domingo día 17 de agosto, a las 20 horas, con la bajada de la patrona Nuestra Señora de la Asunción desde la Parroquia Mayor de Santiago hasta la ermita de San Agustín y con la actuación del grupo El Consorcio (Jardín de la Glorieta) y un espectacular castillo de fuegos artificiales.
Al año que viene, mas…. y mejor para una fiesta de la Vendimia que lleva años reclamando la declaración de Fiesta de Interés Turística Nacional.