01/07/2025
¿Alguna vez has sentido un n**o en el pecho y no sabes si es tristeza, rabia o solo cansancio?
¿Te cuesta explicar lo que sientes, incluso a ti misma?
Esto tiene nombre, y no es una rareza.
Se llama alexitimia.
Es la dificultad para reconocer, expresar o incluso identificar las propias emociones.
No es que no sientas.
Es que no sabes cómo traducir lo que pasa dentro de ti.
Personas con alexitimia suelen decir frases como:
– “Estoy mal, pero no sé por qué.”
– “No me sale llorar.”
– “Solo me siento raro, vacío.”
– “Cuando me preguntan cómo estoy, no sé qué contestar.”
¿Te suena familiar?
No es falta de inteligencia emocional, ni debilidad.
Muchas veces es resultado de haber crecido en entornos donde sentir estaba prohibido o no se nombraba.
Donde te enseñaron a callar, a aguantar, a “no hacer un drama”.
Pero reprimir no es lo mismo que superar.
Y no saber nombrar lo que sentimos… también nos aleja de los demás.
Nos hace responder con irritación cuando en realidad estamos heridos.
Nos hace parecer fríos cuando en el fondo estamos saturados.
Hablar de alexitimia es empezar a darle permiso a tus emociones para existir.
No para controlarte, sino para enseñarte qué necesitas.
Y si esto que digo te resuena…
no estás solo, no estás sola.
Esto tiene nombre.
Y también tiene caminos de salida.