20/04/2025
No es una coincidencia que el huevo se haya convertido en un símbolo de la vida y de la creación.
Tiene un papel importante en la alimentación de Semana Santa, pero teñir y decorar los huevos es una costumbre que se remonta a tiempos antiguos.
El color más utilizado es el rojo, lo cual puede explicarse por la creencia en el poder mágico de los colores.
Al rojo se le atribuía una fuerza protectora. Según algunas creencias, el color rojo de los huevos simboliza la sangre de Cristo.
La tradición de pintar y decorar huevos se ha extendido por todo el mundo.
Además del huevo, antiguamente también tenía un papel especial la rama de sauce 🌿, que originalmente representaba las ramas de palma con las que el pueblo recibió a Jesús al entrar en Jerusalén.
La creencia popular le otorgaba a estas ramas poderes curativos, por lo que se conservaban cuidadosamente incluso después de Pascua — generalmente detrás de una imagen sagrada o bajo el techo de la casa, para protegerla de los rayos, según las supersticiones.
El domingo de Pascua, las ramas de sauce eran bendecidas, para que tuvieran un poder sanador y protector.