05/10/2025
*¡Buenos días familia!*
Cuando hacemos el bien o grandes cosas para ayudar a los demás, enseguida esperamos que nos devuelvan o reconozcan todo lo que hemos hecho. Incluso, ahora se suben estos gestos rápidamente a las redes sociales, para que no sólo reconozcan nuestra valía, sino para que seamos el centro y ocupemos el protagonismo que tanto ansiamos.
Cuando nadie nos dice nada, ni nos agradecen, ni nos reconocen nuestra buena acción, nos sentimos: frustrados, tristes, desanimados o llenos de ira.
No hemos aprendido nada, y Jesús nos quiere enseñar: se hace el bien por amor, porque la gracia de Dios actúa dentro de nosotros.
Seríamos sumamente necios si estuviéramos frente a Dios el día del juicio y pidiéramos ser juzgados desde nuestra justicia y no desde la gracia. (Porque de esta forma seguro que suspenderíamos...)
Les invito a orar y meditar con la Palabra de Dios.
*Recemos por la paz en Ucrania y Palestina, por la paz en el mundo entero.*
*Domingo 5 de octubre de 2025. Domingo 27° de Tiempo Ordinario, Ciclo C.*
*1.- Paso. Oración*
Busca un lugar tranquilo donde puedas leer en paz la palabra de Dios. Serena tu mente y toma aire varias veces profundamente. Invoca al Espíritu Santo.
Ven, Espíritu Divino,
manda tu luz desde el cielo.
Padre amoroso del pobre,
don en tus dones espléndido
Luz que penetras las almas,
fuente del mayor consuelo.
Ven, dulce huésped del alma,
descanso de nuestro esfuerzo.
Tregua en el duro trabajo,
brisa en las horas de fuego.
Gozo que enjuga las lágrimas
y reconforta en los duelos.
Entra hasta el fondo del alma
divina luz y enriquécenos.
Mira el vacío del hombre
si tú le faltas por dentro.
Mira el poder del pecado
cuando no envías tu aliento.
Riega la tierra en sequía,
sana el corazón enfermo
Lava las manchas,
infunde calor de vida en el hielo,
doma el espíritu indómito,
guía al que tuerce el sendero.
Reparte tus siete dones
según la fe de tus siervos.
Por tu bondad y tu gracia,
dale al esfuerzo su mérito.
Salva al que busca salvarse
y danos tu gozo eterno. Amén.
*2. Paso. Lectura de la Palabra*
*Lc 17,5-10: ¡Si tuvierais fe..!*
En aquel tiempo, los Apóstoles dijeron al Señor: -Auméntanos la fe.
El Señor contestó: -Si tuvierais fe como un granito de mostaza, diríais a esa morera: -Arráncate de raíz y plántate en el mar, y os obedecería.
Suponed que un criado vuestro trabaja como labrador o como pastor, cuando vuelve del campo, ¿quién de vosotros le dice: En seguida, ven y ponte a la mesa?
¿No le diréis: -Prepárame de cenar, cíñete y sírveme mientras como y bebo; y después comerás y beberás tú? ¿Tenéis que estar agradecidos al criado porque ha hecho lo mandado?
Lo mismo vosotros: Cuando hayáis hecho todo lo mandado, decid: -Somos unos pobres siervos, hemos hecho lo que teníamos que hacer. Palabra del Señor.
*3. Paso. ¿Qué dice la Palabra?*
Con este Evangelio termina la segunda etapa del camino de Jesús hacia Jerusalén. Continúa su instrucción a los discípulos, aquí denominados como “apóstoles.” San Lucas nos sigue presentando las enseñanzas de Jesús para la vida en comunidad. Utiliza varios refranes o dichos breves de Jesús, aparentemente sin relación, pero que nuestro evangelista entrelaza con una fluidez natural.
Ante las exigencias del mensaje de Jesús, los discípulos hacen una petición al Señor: *"Auméntanos la fe."* Jesús para responder usa la imagen de la semilla de mostaza, la más pequeña de su época. Así, utilizando una hipérbole (una comparación exagerada); aunque fe sea tan insignificante como el grano de mostaza, es capaz de mover un árbol al mar. De esta forma quiere demostrar el gran poder que tiene aún la fe más pequeña. ¿Jesús está afirmando que los discípulos tienen esta fe necesaria o que no la tienen? En los textos paralelos de Mateo parece que no la tienen. (Mt 17, 20) Lucas ni lo afirma no lo niega.
La segunda comparación nos presenta a un criado que trabaja la tierra, pero que al llegar a casa de su Señor, se pone a servirlo. Jesús usa una pregunta retórica, para decirnos que el criado hará lo contrario de esta pregunta: *"¿Quién de vosotros le dice: En seguida, ven y ponte a la mesa?"* Esta parábola se nos hace difícil entenderla por varias razones:
1.- Parece que Jesús aprueba la esclavitud.
2.- Parece descuidado e injusto.
3.-No es nuestra experiencia. Estamos acostumbrados a premiar a los empleados fieles.
Jesús, simplemente utiliza una situación común de su época para ilustrar una verdad espiritual, que “Dios no nos debe nada por vivir buenas vidas cristianas." Pero, sobre todo, nos dice cómo debe ser la actitud del discípulo: *"Somos unos pobres siervos, hemos hecho lo que teníamos que hacer."*
*Palabra del Papa.*
_*Jesús compara el Reino de Dios con un grano de mostaza. Es una semilla muy pequeña, y sin embargo se desarrolla tanto que se convierte en la más grande de todas las plantas del huerto: un crecimiento imprevisible, sorprendente. No es fácil para nosotros entrar en esta lógica de la imprevisibilidad de Dios y aceptarla en nuestra vida. Pero hoy el Señor nos exhorta a una actitud de fe que supera nuestros proyectos, nuestros cálculos, nuestras previsiones. Dios es siempre el Dios de las sorpresas. El Señor siempre nos sorprende. Es una invitación a abrirnos con más generosidad a los planes de Dios, tanto en el plano personal como en el comunitario. En nuestras comunidades es necesario poner atención en las pequeñas y grandes ocasiones de bien que el Señor nos ofrece, dejándonos implicar en sus dinámicas de amor, de acogida y de misericordia hacia todos. La autenticidad de la misión de la Iglesia no está dada por el éxito o por la gratificación de los resultados, sino por el ir adelante con la valentía de la confianza y la humildad del abandono en Dios. (Ángelus de S.S. Francisco, 17 de junio de 2018)*_
*4.- Paso. ¿Qué me dice el Evangelio?*
¿Qué siento al leer este Evangelio?
¿Qué es lo que me llama la atención del Evangelio?
¿Cómo es nuestra fe? ¿Es cómo un granito de mostaza?
*5.- Paso. ¿Qué le digo al Señor?*
Haz un tiempo de silencio. Deja que este Evangelio penetre en tu corazón. Escucha la voz de tu interior, y deja que brote tu oración, háblale con calma.
