
01/07/2025
Medusa: no nací monstruo, la reconstruyeron para sobrevivir
Dicen que Medusa era un monstruo que convertía en piedra a quien la miraba. Pero la verdad es que no siempre fue así. Antes era una mujer hermosa, pura, con sueños. Hasta que alguien la rompió. Fue violada, traicionada, humillada… y entonces la salvaron, la reconstruyeron, le dieron el poder de protegerse y jamás volver a ser lastimada.
Tatuarse a Medusa es un acto de rebeldía, de supervivencia. Es decirle al mundo: “no nací fuerte, me hicieron fuerte”. Es el grito de todas las mujeres que un día creyeron que se iban a morir de dolor, que pensaron que no podrían levantarse, pero que hoy miran de frente y dicen: “inténtalo otra vez, ya no me vuelves a romper”.
Cada lágrima que vertió Medusa se convirtió en piedra. Cada herida se transformó en serpiente lista para protegerla. Cada mujer que lleva su imagen lleva también la historia de alguien que sobrevivió.
No es monstruo. Es la versión que nació cuando la rescataron del abismo y la hicieron imparable.
Y tú… ¿qué hiciste con el dolor que te rompió?