
04/07/2025
Nacida en 1864, Camille Claudel fue una escultora visionaria, rebelde y adelantada a su tiempo. En una época en la que el arte estaba dominado por los hombres, desafió las normas y se abrió camino en un mundo que no estaba listo para aceptar su grandeza.
Desde joven, mostró un talento excepcional para la escultura. Soñaba con estudiar en la prestigiosa École des Beaux-Arts de París, pero la institución estaba cerrada a las mujeres. En su lugar, asistió a estudios alternativos, donde su talento no tardó en brillar.
Su destino cambió cuando conoció al célebre escultor Auguste Rodin. La atracción entre ambos fue inmediata y ardiente. Camille no solo fue su musa, sino también su colaboradora y su igual en el arte. Trabajaron juntos en algunas de las esculturas más icónicas del maestro, y su amor quedó inmortalizado en el mármol y el bronce.
Pero Rodin ya tenía una pareja de toda la vida, Rose Beuret, y nunca estuvo dispuesto a dejarla. A medida que su relación con Camille se desmoronaba, también lo hacía su mundo.
Cuando Rodin la dejó, su carrera se vino abajo. La sociedad no la veía como una artista independiente, sino como la "ex amante de Rodin". Sola y despreciada, luchó por vender su obra, mientras su salud mental se deterioraba.
Su familia, en especial su hermano, el poeta Paul Claudel, consideraba su arte "demasiado moderno" y su comportamiento una vergüenza. En 1913, fue ingresada a la fuerza en un hospital psiquiátrico, donde pasó 30 años, abandonada y olvidada.
Las cartas que escribió desde el hospital muestran su lucidez, dolor y desesperación. Clamó por su libertad, pero su familia la mantuvo encerrada hasta el final de su vida.
El 19 de octubre de 1943, Camille Claudel murió de desnutrición, completamente sola. Su familia ni siquiera asistió a su funeral, y su cuerpo fue arrojado a una tumba común.
Décadas después, el mundo redescubrió su genio. Hoy, su legado es indiscutible: sus esculturas se exhiben junto a las de Rodin, y un museo entero en Francia honra su obra.
Camille Claudel ya no es un nombre olvidado. Es una de las escultoras más importantes de la historia, una mujer que desafió su tiempo y cuyo arte sigue cautivando al mundo.