20/09/2025
HAZLO BIEN O NO LO HAGAS…¿O NO?
Hoy estaba reflexionando sobre una frase, “hazlo bien o no lo hagas”, personalmente sobre lo mucho que me ha paralizado y que todavía lo sigue haciendo en ocasiones. Es de esas frases que nos grabamos en algún momento de nuestra vida, como muchas creencias, en base a lo que escuchábamos, a lo que se nos exigía, a lo que creíamos que era “lo correcto”. ¿A cuántos no nos la han dicho y se volvió ley?
En mi caso, si hubiera esperado a que todo estuviera “perfecto” para lanzar mi negocio, probablemente nunca lo hubiera hecho, y aun así pasamos semanas dando vueltas al logo, al nombre, a los paquetes, a mil cosas, esperando un permiso invisible que no iba a llegar, revisando una y otra vez detalles que en realidad no eran críticos mientras el miedo a equivocarme me congelaba.
Hoy me doy cuenta de que no era tanto por perfección técnica, sino por la seguridad de que gustara, de que el trabajo tuviera significado, de que no me criticaran o alguien se burlara. Pero llegó el día y se lanzó, así como estaba, como un producto mínimo viable. Al principio, como muchas cosas, no salió perfecto: tuvimos errores de cálculo, algunas cosas no salieron bien, pero nadie dijo nada del nombre ni del logo.
Y lo mismo pasó cuando quise empezar a grabar vídeos, me repetía una y mil veces que no era buena, que no me iba a salir, que iba a hacer el ridículo… hasta que alguien me dijo algo que me obligó a moverme: si no empiezas, nunca vas a mejorar. Y lo hice. El primer vídeo es malísimo, obvio; el segundo, tantito menos; y así sucesivamente, creo que ya no están “tan peores”.
El problema en ambos casos no era nada más “que saliera mal”, sino miedo disfrazado de exigencia. La frase “hazlo bien o no lo hagas” funciona como un filtro paralizante, y yo la había tomado, como muchas otras creencias, como regla universal en lugar de mirarla con criterio.
Claro que hay a quienes esta frase les funciona como motivación y les empuja en lugar de paralizar; y está perfecto. Pero cada quien tenemos un funcionamiento distinto, y por lo que sé, a la mayoría nos impide avanzar. Por eso es importante tener un criterio propio y cuestionar más allá de aceptar y dejar que el ruido exterior nos domine.
Hoy, después de reflexionar y desmenuzar la frase, llegué a un significado nuevo que a mí me funciona:
“Hazlo, si no está bien, se corrige. Es información, no equivocación.”
Contrario a lo que puedas pensar, no es un permiso para la mediocridad ni condescendencia. Es hacer lo mejor, con compromiso y sin dejar que los detalles que no importan nos detengan por días, meses o años. Es aprender mientras avanzas, confiar en tu criterio y tal vez regarla, pero avanzar de todos modos.
Y para no quedarnos solo en teoría, ni confiar únicamente en nuestra intuición (que claro que es importante), te (nos) propongo un mini-sistema práctico que nos ayude a decidir rápido qué sí necesita perfección y qué podemos iterar, enfocado en productos/servicios:
• ¿Afecta la seguridad / experiencia básica del cliente? → Entonces sí tiene que salir bien desde la primera.
•¿Es solo estética o detalle accesorio? → Puede iterarse.
• ¿Me estoy tardando más de X días/semanas sin avanzar? → Señal de que ya estoy en la trampa del “todavía no está listo”.
• ¿Lo estoy retrasando porque realmente necesita mejorar o porque me da miedo cómo me verán los demás?
Haciendo este mini check list podemos avanzar aunque no esté todo resuelto, avanzar imperfecto es donde realmente ocurre el aprendizaje. Cada paso, aunque sea pequeño o salga “mal”, te acerca más a tus metas y a la versión de ti que confía en sí misma.
No se trata de hacer todo perfecto, sino de moverse, aprender y mejorar mientras avanzas.
💡 ¿Qué estamos dejando de hacer por miedo a equivocarnos?
📥 Y si quieres un empujón extra, dejé un PDF en los comentarios con una mini guía práctica para decidir en el día a dia qué sí necesita perfección y qué se puede iterar. Descárgalo, úsalo y comparte cómo te ayuda a avanzar 👇
En la imagen:
- proceso de diseño
- como empezamos
- como va