01/09/2025
🩷 Un día me preguntaron… “¿Por qué estás vendiendo? ¿Que no te da dinero tu esposo?”
Y me quedé pensando…
Porque esa pregunta, aunque parece inocente, tiene detrás una idea equivocada: que como mujeres, solo deberíamos trabajar si “nos hace falta”, como si fuera por necesidad o por falta de alguien más que provea.
Pero la realidad es otra…
✨ Trabajo porque tengo metas.
✨ Porque tengo sueños grandes.
✨ Porque quiero crecer.
✨ Porque quiero construir algo mío.
Y sí… Tengo una pareja, un compañero. Pero dos son mejor que uno. No se trata de quién “debe” mantener, sino de hacer equipo, de sumar fuerzas, de avanzar juntos.
Cuando una mujer decide emprender, no siempre es por necesidad. A veces es por amor propio, por ambición sana, por dar el ejemplo, por dejar huella. No se trata solo de dinero… se trata de libertad, propósito, pasión.
Yo elijo vender, emprender, trabajar…
Porque cada venta me recuerda que soy capaz.
Porque cada logro me empodera.
Porque cada paso que doy, me acerca más a esa vida que sueño.
Así que sí… Tengo un compañero. Pero no me conformo. Porque juntos, llegamos más lejos.
Porque haciendo equipo, no solo pagamos cuentas… construimos futuros.
Y si un día no hay nadie que camine conmigo, igual me lanzo… porque aprendí que mi valor no depende de lo que alguien más me da, sino de lo que yo soy capaz de crear con mis propias manos. 💪🏽🩷
́
Tomada de la red