25/10/2024
📚¿Aprender a hablar y a leer es "natural" para los seres humanos?
Aprender a hablar es algo "natural" para los seres humanos. Aprendemos a hablar sin esfuerzo mediante la interacción y el contacto que tenemos con el lugar donde vivimos. Pero leer no lo es. Aprender a leer no requiere únicamente de esa interacción con el ambiente, sino que requiere además de un proceso de maduración cerebral, y ningún ser vivo madura a la misma vez que otro, por mucho que nosotros lo forcemos.
🧠¿Qué quiere decir eso de que "requiere de un proceso de maduración cerebral"?
Pues que las zonas cerebrales que intervienen en el proceso lector deben estar maduras y preparadas para que el niño pueda adquirir este aprendizaje, y esta maduración cerebral es diferente en cada niño como ser humano único e irrepetible que es.
📖Entonces, ¿Tiene sentido que en la escuela obliguen a 25 niños a aprender a leer al mismo tiempo?
No tiene sentido, y además es muy perjudicial y peligroso obligar a leer a niños cuyo cerebro no está preparado todavía para ello. De hacerlo el niño se sentirá frustrado constantemente, llegando a creer que no es válido para adquirir este aprendizaje. Con el tiempo, si seguimos obligando, llegará a odiar la lectura y todo lo relacionado con los libros, entre otros aspectos negativos para su desarrollo.
🤦¿Por qué en algunas escuelas se obliga entonces a los niños a que aprendan a leer?
Bueno, la sociedad histérica y competitiva en la que vivimos nos lleva a que se compita también en este sentido. Incluso en una misma escuela los docentes de diferentes aulas compiten por ver quien enseña antes a más niños a leer. Esto es una auténtica locura. Mientras esto pasa, el docente que sí respeta estos ritmos madurativos y de desarrollo es continuamente juzgado y cuestionado por algunos de sus propios compañeros y familias porque supuestamente "no está haciendo bien su trabajo". Este docente es el que debería estar muy bien valorado.
❤Obliga a un niño a que aprenda a leer y conseguirás que odie la lectura para siempre; acompáñalo respetando sus ritmos madurativos disfrutando del proceso y descubrirá el placer y el amor por los libros.
Tomado del muro de Pedro Valenzuela/Guía Montessori