
27/08/2025
💌 La carta que nunca llegó
Sergio estaba limpiando la vieja casa de su abuela cuando encontró una carta amarillenta, olvidada en un cajón. Estaba dirigida a su madre, escrita por su padre mucho antes de que él naciera. Nunca había llegado, nunca la había leído nadie. Sus manos temblaban mientras la abría, y un aroma antiguo lo transportó al pasado, a un tiempo que nunca conoció.
Las palabras de su padre eran sinceras, llenas de amor y arrepentimiento, explicando decisiones, miedos y promesas que jamás se cumplieron. Sergio no podía contener las lágrimas; comprendió que algunas heridas no se curan con el tiempo, pero sí con comprensión y aceptación. Mientras leía, sintió que conocía a un hombre que había dejado su huella sin darse cuenta.
Guardó la carta cerca del corazón, como si pudiera cerrar un capítulo que nunca se cerró, y entendió que, aunque algunos mensajes lleguen tarde, siempre tienen el poder de transformar la vida de alguien. A veces, lo que nunca recibimos nos enseña más que lo que siempre tuvimos, y por un instante, Sergio sintió una conexión que trascendía el tiempo y la distancia.