13/12/2023
| CH'UMPIWILCAS Y K'ANAS SE ENFRENTARON EN TOCTO SIGUIENDO UNA VIEJA RIVALIDAD ENTRE DOS PUEBLOS
La tradicional batalla de Toqto es un enfrentamiento ritual y tradicional entre caneños y chumbivilcanos que mantienen una antigua rivalidad y que en otros tiempos protagonizaron sanguinarios encuentros que eran parte de sus existencias, la misma que se realiza el 08 de diciembre de cada año.
Participan los pobladores de Chumbivilcas son jóvenes varones de las comunidades de Wanako, Aucho, Q’ewincha, todas en el distrito de Livitaca. Los tradicionales contrincantes de Canas provienen generalmente de Cheq’a y Q’ewe y otros distritos y comunidades de la Altiva Provincia de Canas, Cada año, se concretan tres enfrentamientos en Toqto: el 8 de diciembre, en Año Nuevo y durante la festividad de Compadres (con fecha variable en febrero).
¿Cuál es el origen de una tradición tan arraigada como la de estas batallas? La antropología les ha dedicado tiempo y cerebro, pero no se tiene aún una versión del todo confirmada. Según la investigadora Vicentina Galiano: “Livitaca está entre los límites del Condesuyo y Qollasuyo […]. La pelea de Tocto se da entre comunidades de Livitaca (Condesuyo) y las comunidades de Canas (Collasuyo) por reconocimiento de sus linderos” . Así, la conocida rivalidad de límites entre los k’anas y los ch’umpiwillkas habría conllevado a luchas por dominio geopolítico y simbólico.
A ello se podría sumar la hipótesis que se trataba de culturas que se disputaban la voluntad de la naturaleza. El corazón de la contienda se ha protagonizado desde larga data en Quchapata, lugar vinculado al agua. En esta línea, el antropólogo Héctor Espinoza sostiene que la abundancia de lluvias se le aseguraba al bando ganador: “la pelea era por el fenómeno atmosférico”.
Otra versión adoptada por los propios participantes de las batallas es que estas fueron una manera de prepararse bélica y mentalmente en los años previos a la rebelión de Túpac Amaru II; aprendizaje que les sirvió para alzarse contra los españoles y tratar de subvertir el orden colonial. Pero si se pregunta por qué lo hace a un joven qorilazo audaz, cargado de adrenalina, que va a pelear, la respuesta será, “Solo seguimos las huellas de nuestros antepasados”. El cómo y el por qué son irrelevantes; se asumen naturalmente como un deber ancestral.