13/10/2025
PERU: DEL RACISMO A LA IDENTIDAD Y AUTOESTIMA CULTURAL
Por: Alipio Canahua Murillo. Especialista en sistemas agrícolas andinos.
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Revisando nuestra historia.
Los de las generaciones de los 60’ y 70’ del siglo pasado, recordamos que, en las escuelas y colegios, no hacían celebrar con ciertos eventos oficiales, cada 12 de octubre, como el “Día de la Raza”, con arengas complementarias como: “Viva la madre patria España”. Fecha que coincide con el descubrimiento, invasión y sometimiento al coloniaje y esclavismo de las grandes culturas y civilizaciones del “nuevo mundo” o “América”, como la AZTECA e INCA.
Y, en forma despectiva, cada 24 de junio, como el “Día del Indio”; a los descendientes de estas civilizaciones y culturas, con racismo marcado, nos denominaban como, indios, cholos y/o serramos, en especial a los originarios de la sierra, de piel cobriza o trigueña. No obstante que la sierra o los andes, fue cuna de la gran civilización y cultura INCA. Como complemento, a los de apellidos andinos originarios; así como a los que nos alimentábamos con productos y sub productos andinos como chuño, karapulcra, charki, quinua, kañiwa, kiwicha y tarwi o chocho; carnes de alpaca, llama y cuy, nos consideraban como de raza inferior o simplemente indios.
Los descendientes de la cultura Inca, en casi su generalidad, eran servidumbres de grandes latifundistas, de la burócratas estatales, letrados y comerciantes, hereditarios de la colonia española, de apellidos hispanos rimbombantes y compuestos que, con la Independencia de San Martin y Bolívar, no hubo cambios significativos en cuanto a la libertad e independencia de los aborígenes.
Revaloración y reivindicación de la cultura andina.
Estas clases sociales y tipificación ra***ta excluyente, van cambiando con los movimientos campesinos y fundamentalmente con el gobierno revolucionario militar liderado por el Gral. Juan Velasco Alvarado (1969), con la Reforma Agraria y eliminación del gamonalismo y servidumbre feudal. En simultaneo, se inicia la revaloración y reivindicación de la cultura y agricultura andina.
Como precursores del nuevo escenario, fueron los pensadores y escritores J.C. Mariátegui y José María Arguedas. En revaloración de la agricultura; así como de la alimentación nutrición andina prehispánica, es pertinente renombrar a científicos como: Martín Cárdenas y Julio Rea de Bolivia; a los peruanos S. E. Antúnez de Mayolo, , Mario E. Tapia, Oscar Blanco y Julio Valladolid; quienes, demuestran las excelentes propiedades nutraceúticas de los productos agropecuarios andinos; así como su adaptación a los rigores y al cambio climático. Por lo que, ahora, considerados como patrimonio de la humanidad, por la FAO.
Este, es un proceso que continua, en cuanto a la identidad cultural y autoestima. En este contexto, los protagonistas de la historia política, económica, social y cultural no son de exclusividad los de apellidos hispanos y de “raza” blanca; con el acceso a la educación y migración son, también, de apellidos andinos y los que consumen productos andinos.
Nuevo paradigma inclusivo para nuestro desarrollo económico y humano.
Próximos a cumplir 500 años de captura del ultimo Inca Atahualpa, destrucción del imperio Inca e implementación de la colonia española, ya no es pertinente diferenciar razas indígena y blanca hispana. Además, en el proceso, se incorporan razas de otros continentes, como de África y de Asia.
De manera que, estamos en una mezcla o en proceso mestizaje; como planteara J.M. Arguedas, debemos tener una visión, en nuestras políticas y estrategias de desarrollo económico y humano, como una población de “Todas las sangres”; consiguientemente, contar con un marco y práctica de sincretismo cultural andino – plural.
A manera de reiteración, con autoestima e identidad cultural plural, para aprovechar nuestras potencialidades humanas, en recursos naturales y nuestro legado histórico; frente a amenazas latentes como la desnutrición crónica, cambio climático, pandemias, migración, y perdida de nuestra soberanía alimentaria.