06/02/2025
El delantal de mi abuela: un símbolo de amor y cuidado. 😍
El delantal de mi abuela no era simplemente una prenda para proteger su ropa, era una herramienta llena de vida y propósito. Lo usaba para sacar sartenes calientes del horno sin quemarse y para secar nuestras lágrimas cuando algo nos hacía llorar. También lo empleaba para limpiarnos la cara después de nuestras aventuras en el jardín.
En el gallinero, servía para cargar huevos y, a veces, un pollito curioso. Cuando venía alguien de visita, lo usaba para darnos un cálido abrazo, especialmente a los más tímidos, llenándonos de seguridad. En la cocina, lo agitaba sobre el fuego para avivarlo y cargaba papas, verduras o leña recién traída del campo. En otoño, incluso recogía manzanas caídas con él.
Si llegaban visitas inesperadas, mi abuela sacudía el delantal para quitar rápidamente el polvo. Cuando era hora de comer, se paraba en la escalera, agitaba su delantal al viento y llamaba a todos a la mesa. Incluso colocaba sus tartas en la ventana para que se enfriaran, siempre confiando en su fiel delantal.
Ese viejo delantal era mucho más que una prenda. Era parte de la vida diaria y de los recuerdos más entrañables. En honor a todas las abuelas que nos cuidaron con amor infinito.