07/14/2025
Lunes 14 de julio de 2025
2027 en Baja California Sur: El adiós anticipado de Cristian Agúndez y el ascenso de Homero Davis.
Por L. Reyes Cotta
La política no perdona ni olvida. Y menos cuando los tiempos se aceleran y las definiciones comienzan a perfilarse con claridad. El pasado domingo, durante la visita de la presidenta Claudia Sheinbaum a La Paz, se confirmó lo que desde hace tiempo se rumora en los pasillos del poder sudcaliforniano: Cristian Agúndez Gómez ha quedado fuera del proyecto de la Cuarta Transformación rumbo al 2027.
Ni llamado, ni foto, ni saludo. El presidente municipal de Los Cabos fue ignorado por completo en la agenda oficial, marcando así su distanciamiento no solo del liderazgo nacional de Morena, sino también de una parte significativa de la militancia morenista y de los operadores federales en el estado. Un gesto político que no es menor, porque en política, como en la ópera, las ausencias también cantan.
El candidato que no será… y el que sí podría ser
Mientras Cristian Agúndez insiste en colocarse como el “natural” aspirante a la gubernatura —apelando más a un apellido y a un viejo grupo de poder que a resultados visibles o liderazgo real—, las encuestas nacionales y los sondeos internos de Morena apuntan con fuerza hacia otro nombre: el del senador Homero Davis Castro.
Davis, ex secretario general de gobierno y actual senador de la República, no solo cuenta con el respaldo de los sectores institucionales de la 4T, sino que ha logrado tejer alianzas y mantener una imagen de cercanía, firmeza y continuidad con el proyecto federal, sin escándalos ni confrontaciones inútiles.
Hoy, mientras Agúndez acumula rechazos —incluso dentro del propio PT—, Homero Davis encabeza las preferencias en diversos ejercicios demoscópicos, perfilándose como el cuadro mejor posicionado para darle continuidad y estabilidad al movimiento en Baja California Sur.
¿Capricho o suicidio político del PT?
Si el Partido del Trabajo insiste en presentar a Agúndez como su carta para el 2027 —fuera o dentro de la coalición—, cometería un error histórico que podría costarle su registro estatal. Hoy el PT no alcanza ni el 5% en intención del voto en Baja California Sur, y sin Morena, su margen de maniobra es nulo. Más que una candidatura competitiva, sería un acto de obstinación personalista.
Y es que la figura de Cristian Agúndez representa, para muchos, lo viejo disfrazado de nuevo, la herencia de un cacicazgo que ya no conecta con la ciudadanía ni con las nuevas dinámicas políticas. Mientras tanto, Davis avanza con método, con disciplina, y sobre todo con el respaldo de Palacio Nacional.
Conclusión: el futuro no espera
La visita presidencial dejó mucho más que discursos. Dejó señales. Y una de las más claras es que el camino al 2027 en Baja California Sur no se construirá con caprichos personales ni con aspiraciones heredadas, sino con cuadros consolidados, con legitimidad y con visión de Estado.
Cristian Agúndez Gómez deberá tomar una decisión: aceptar su lugar en la nueva estructura del poder o lanzarse a una aventura solitaria que podría terminar en el fracaso total de su grupo y su partido.
Homero Davis, por el contrario, ya comenzó a caminar como el hombre fuerte del lopezobradorismo sudcaliforniano. Y en política, como en la vida, no hay nada más poderoso que estar en el lugar y el momento correcto.
