16/04/2025
Ronda Campesina de Nuñoa desmiente acusaciones de Hermógenes Zamata y denuncia complot minero-mediático contra el pueblo
La ronda de Nuñao responde con firmeza a las graves e incoherentes acusaciones de Hermógenes Zamata, quien afirma haber sido agredido por cinco horas continuas con puñetes, patadas y látigos el pasado 22 de marzo. Sin embargo, su historia presenta serias inconsistencias:
recién el 12 de abril más de veinte días después acudió a un centro de salud, y ahora pretende culpar a la ronda de lesiones que no mostró en semanas. Esta demora levanta serios cuestionamientos sobre la veracidad de sus declaraciones, especialmente porque fue visto en actividad normal durante las semanas posteriores a la supuesta agresión. Ahora, sorpresivamente, responsabiliza a la ronda por su estado físico
La ronda rechaza categóricamente cualquier acto de violencia como el que Zamata describe. Sí se reconoce que se le aplicó una medida disciplinaria, de acuerdo a las normas comunales, por actos de corrupción al recibir coimas en el fallido proyecto de la carretera, por su conducta provocadora contra el pueblo y por su abierta colaboración con la minera MINSUR, que tantos perjuicios busca traer a nuestra tierra.
Pero este ataque no es casual ni aislado. Detrás de esta novela mal armada hay una red de intereses que responde a la minería y al poder económico. Una verdadera banda que busca desestabilizar a la organización de la ronda y allanar el camino al saqueo. Esta banda está encabezada por la radio Altoandina (de Eusebio Tacca), Nicolás Hancco, la radio Visión Nuñao (de Gerardo Apana), el alcalde de Nuñao y, por supuesto, la empresa minera MINSUR y algunos que no mencionaremos aún. Todos ellos vienen trabajando juntos, como operadores políticos y mediáticos del extractivismo, mintiendo descaradamente para debilitar a la ronda y dividir al pueblo.
El pueblo no es ingenuo: sabe quiénes son los verdaderos traidores y quiénes luchan por el agua, la tierra y la vida.