22/09/2025
La Casa Blanca ha respondido a la carta que hace dos semanas le envió Nicolás Maduro a Donald Trump en tono conciliador. “Francamente, tenía una lista de mentiras y la posición del ejecutivo sobre Venezuela no ha cambiado. Pensamos que el régimen de Maduro es ilegítimo”, ha comentado este lunes ante los medios Karoline Leavitt, la secretaria de prensa. Unas horas antes, el presidente de Estados Unidos se había mofado en redes sociales de la instrucción militar que reciben los venezolanos para prepararse para una hipotética invasión: “ULTRASECRETO: Hemos sorprendido a la milicia venezolana en entrenamiento. ¡Una amenaza muy seria!“, escribía sobre un vídeo que muestra los adiestramientos.Bromas de mal gusto al margen, Leavitt se refería a la carta en la que Maduro le pedía rebajar la tensión entre los dos países, disparada desde que hace un mes una flota norteamericana se fondeara en el Caribe y disparara con armamento bélico a las lanchas que salen desde las costas venezolanas cargadas de droga, según las autoridades de Washington. Leavitt ha añadido: “El presidente Trump ha demostrado que está dispuesto a usar todos los medios necesarios para ponerle coto al tráfico de dr**as ilegales desde Venezuela hacia los EEUU”.
La presión militar de Trump ha hecho mella en el chavismo. Maduro y su círculo piensan que estos son los pasos previos a una invasión. Por eso han desplegado tropas en la frontera y entrenan a la población en el manejo de armas y tácticas de combate. Según fuentes internas consultadas, Maduro sospecha que buscan una ruptura interna en su Gobierno y en las fuerzas militares que acabe deponiéndolo. El chavismo ha perdido muchísimo apoyo en Venezuela, y eso quedó plasmado en las elecciones presidenciales del año pasado, en las que la oposición venció con facilidad. (Maduro se ha negado a aceptar los resultados pese a todas las evidencias).Ese es uno de los motivos por los que Estados Unidos considera ilegítimo su mandato. Preocupado por el devenir de los acontecimientos, Maduro le envió a Trump una carta pidiéndole retomar el diálogo a través de Richard Grenell, enviado especial de la Casa Blanca. A finales de enero, nada más llegar Trump al Despacho