
15/08/2025
Uno de los vehículos más icónicos de Mercedes-Benz, sin lugar a dudas, es el Clase G, los primeros disponibles para uso civil comenzaron a venderse en 1979, pero no fue hasta la década de 1980 que el vehículo consolidó su carácter moderno y cuadrado, ahora, la marca busca preservar una unidad de estos modelos
Mercedes-Benz ha creado la escultura de resina sintética más grande del mundo al encapsular un G-Class de 1979 en 44 toneladas de resina, en una instalación artística llamada "Gravedad".
La obra busca capturar el vehículo suspendido en el tiempo, como un fósil atrapado en ámbar, el proceso tomó 90 días, formando un bloque de más de 5 metros de largo, 2.5 metros de ancho y 3 metros de alto, que preserva el todoterreno en su hábitat natural.
No es CGI. No es escultura. Es un coche real, congelado para siempre, como si fuera un fósil de otra era. Les tomó 90 días solidificarlo.
El resultado: una pieza de arte brutal, inmóvil y perfecta.
Ahora, una unidad de este icónico modelo alemán quedará inmortalizado de una forma muy curiosa. Un homenaje al ícono del todoterreno que no ha cambiado en décadas. ¿Qué les parece esta excentricidad?