05/09/2025
🔴 TENEMOS ACTUALIZACIONES DE ULTIMA HORA sobre este tema gracias al espectrómetro Nirspec del Telescopio Espacial James Webb. Revisemos la cronología:
El 1 de julio de 2025, el sistema Atlas, operado desde Riurtado en Chile, anunció el descubrimiento de un nuevo cuerpo interestelar, el 3I/ATLAS. Este objeto, significativamente más grande que los anteriormente detectados con un tamaño estimado de 4 a 5 kilómetros, viaja a una velocidad considerable de aproximadamente 200,000 kilómetros por hora. Su trayectoria hiperbólica lo lleva a entrar en nuestro sistema solar, pasar por detrás del Sol, acercarse a Marte y Júpiter, y luego abandonarlo para siempre. La singularidad de su recorrido ha captado la atención de la comunidad científica.
Esta trayectoria ha sido calificada como peculiar por el astrónomo Avi Loeb, quien en varias publicaciones y un preprint sugiere que su ángulo de llegada en el plano del sistema solar, su capacidad para visitar múltiples planetas y su paso por el perihelio justo detrás del Sol (lo que dificulta su observación desde la Tierra) podrían no ser una coincidencia. Basándose en la hipótesis del Bosque Oscuro, Loeb propone que estas características podrían ser indicativas de una maniobra planeada, aprovechando la aproximación al Sol para un cambio de órbita, potencialmente hacia la Tierra.
Las hipótesis de Loeb van más allá de una simple maniobra. Él ha propuesto que el 3I/ATLAS podría ser una plataforma espacial de unos 50 kilómetros de tamaño, capaz de albergar a un millón de humanos, y ha calculado que la cantidad de dióxido de carbono que emite, 129 kilogramos por segundo, equivale a las emisiones de 10 millones de personas. Incluso, ha planteado la posibilidad de que el objeto sea una especie de "test de Turing" enviado por una civilización alienígena para evaluar nuestra inteligencia y desarrollo tecnológico.
Las observaciones del 3I/ATLAS han continuado con herramientas avanzadas. El 4 de agosto de 2025, el Telescopio Espacial Hubble publicó imágenes que confirmaban que el objeto es un cometa. Posteriormente, el 25 de agosto de 2025, el Telescopio Espacial James Webb, utilizando su espectrómetro Nirspec, proporcionó datos más detallados. Estos análisis revelaron una composición inusual para un cometa: si bien su exterior está compuesto por hielo de agua, monóxido de carbono (CO) y dióxido de carbono (CO2), la proporción de CO2 es excepcionalmente alta. Se detectó una relación de 8:1 a favor del CO2 en comparación con el agua, lo que representa 16 veces más CO2 de lo esperado para un cometa a su distancia del Sol, una característica muy distinta a casi cualquier otro cometa observado, con la única excepción del C/2016R2.
Sin embargo, los autores del artículo científico con los datos del James Webb también ofrecen explicaciones astronómicas más convencionales para esta composición anómala. Sugieren que el núcleo del cometa podría ser excepcionalmente rico en CO2, lo cual podría deberse a su formación en la línea de hielo de CO2 de su disco protoplanetario de origen. Otras posibilidades incluyen altos niveles de radiación durante su génesis o algún mecanismo que impida la penetración del calor en el cometa, evitando así la sublimación habitual del agua.
Las oportunidades para estudiar el 3I/ATLAS continuarán en los próximos meses. Se espera que el 3 de octubre de este año, el objeto pase cerca de Marte, a una distancia de aproximadamente 30 millones de kilómetros, lo que permitirá observaciones de alta precisión con la cámara High Rise del Mars Reconnaissance Orbiter. Además, se acercará a Júpiter. Ante esta proximidad, Avi Loeb ha propuesto una idea audaz: utilizar la sonda Juno, que ha completado su misión alrededor de Júpiter y estaba destinada a estrellarse en el planeta. La propuesta es redirigir el combustible restante de Juno para interceptar el 3I/ATLAS, lo que podría generar información absolutamente espectacular y sin precedentes sobre un objeto interestelar a través de un encuentro directo (en las próximas horas les publicaremos los detalles de esta propuesta).