23/09/2025
Un hecho increíble rompió la tranquilidad de la localidad de Villa Carmela, en la provincia de Tucumán. Un joven de 22 años llegó a su propio velorio gritando “¡estoy vivo!”, provocando gritos, llantos y una confusión total entre sus familiares y amigos.
El hecho ocurrió el jueves 18 de septiembre y dejó en evidencia un grave error de identificación por parte de la Policía local. Hasta el momento, el cuerpo que estaba en el ataúd no fue identificado y la Justicia ya intervino para esclarecer el insólito episodio.
Todo empezó el jueves pasado, cuando un joven se arrojó bajo las ruedas de un camión cerca del Puente Negro, en Alderetes. El fiscal Carlos Sale caratuló el caso como homicidio culposo, aunque las primeras pericias apuntaron a un posible suicidio.
Al día siguiente, una mujer se presentó en la comisaría y reconoció el cuerpo, aseguró que era su hijo y dijo que lo reconoció por la ropa y algunas características físicas. Con esa declaración, la Justicia autorizó la entrega del cuerpo a la familia sin realizar estudios de ADN ni huellas dactilares.
Fuente: TN