06/10/2025
Fatal coincidencia sobre la misteriosa muerte de Walter Kohn en la Guerra del Chaco
David Zook cita en su monumental obra "La Conducción de la Guerra del Chaco" (que acabamos de editar y publicar en facsimilar) este libro boliviano de Ovidio Urioste, "La encrucijada" (fotos). Libro raro entre los raros y cuya existencia no sospechábamos de no ser por Zook, que lo cita en varias ocasiones. El autor de "La Encrucijada" fue auditor de guerra boliviano en el Chaco.
Sobre lo que pasó con los tanques bolivianos y sus tripulantes en la segunda batalla de Nanawa, Urioste escribe:
"Uno de los tanques que barría las trincheras enemigas, recibió un tiro de cañón por la ventana de observación y degollado materialmente el observador, fué arrancado por el metrallista que abandonó la cabina junto con el oficial de nacionalidad alemana Von Kris, que comandaba el aparato, el cual fué a su vez herido en las dos piernas. Tendidos junto al monstruo de acero que se convirtió en el blanco de nuestra artillería para impedir que los paraguayos pudieran utilizarlo, sintieron zumbar por sus oídos las balas, hasta que llegada la noche y con auxilio de la claridad de la luna, los dos sobrevivientes llegaron hasta nuestras trincheras...".
Obsérvese que Urioste hace referencia a que el observador tenía la cabeza fuera de la escotilla del tanque y que fue "degollado materialmente".
Ahora bien, un artículo publicado en Wikipedia sobre los tanques en la guerra del Chaco, que tiene como una de sus fuentes al Tte. paraguayo Genaro Espínola, que comandó un batallón en la misma segunda batalla de Nanawa, dice, sobre esta batalla y sobre Walter Kohn:
"El tanque se desplazaba con la escotilla abierta debido al calor reinante (pese a que se estaba en pleno invierno) y porque Kohn solía dirigir observando cuidadosamente el terreno circundante para evitar obstáculos, trampas o infantes emboscados con granadas de mano que podían herir a la tripulación. Según el general paraguayo Genaro Espínola (teniente 1° en aquellos días), el tanque habría quedado inmovilizado al ser alcanzado en el habitáculo del conductor, en vez de la torreta, por lo que el carro habría permanecido inmóvil, pero siguió disparando su cañón de 47 mm por un buen rato hasta que su tripulación fue liquidada por la infantería paraguaya".
Fatal coincidencia: el tanque tenía un observador, que fue "degollado" por el fuego enemigo. El artículo que tiene como fuente a un combatiente paraguayo que estuvo en el lugar de los hechos, dice que era Kohn. El libro del auditor de guerra boliviano no menciona el nombre del observador, pero deja claro que no eran ni el alemán Von Kris o Von Krieg ni el metrallista, ya que ambos se salvaron, suerte que no corrió el observador.
Se ha dicho mucho sobre la muerte de Walter Kohn en la guerra del Chaco, diciendo unos autores, militares que estuvieron en el Chaco incluso, que murió en Saavedra, otros en Kilómetro 7, a cuál versión más interesante.
Creemos que Zook, cuyo bello libro cita como fuente la rarísima obra de Urioste, nos da un grande aporte para conocer la realidad.