27/09/2025
En la barbería de hoy, ya no se trata de quedarse con lo clásico nomás porque tiene nombre. Todos respetamos a Wahl por la historia, por abrir camino, pero la realidad es que ahora existen máquinas que la superan en muchos aspectos. Marcas como VGR, Wmark y hasta Kemei están innovando con motores más potentes, baterías que duran el doble, menos calentamiento y cortes más precisos.
Mientras tanto, Wahl sigue viviendo de su fama. Como dice el dicho: ‘Crea fama y échate a dormir’. Y eso es justo lo que pasó: la marca se confió en el peso de su nombre, pero dejó que otras marcas llegaran con fuerza, ofreciendo más por menos.
Y si hablamos de calidad, hay que reconocer que marcas como Babyliss y Stylecraft están haciendo las cosas bien desde el inicio. Por eso se posicionaron tan rápido en el mercado: porque trajeron innovación, diseño, potencia y un respaldo serio para los barberos que buscan lo mejor.
Hoy en día, un barbero que busca rendimiento real ya no se fija solo en lo que dice la caja o en la marca que ‘siempre usó su maestro’. Se fija en lo que funciona, en lo que rinde en la silla y no te deja tirado en medio de un corte. Porque al final, el cliente no te pregunta con qué máquina cortaste, el cliente solo ve el resultado.
Wahl ya no es sinónimo de calidad absoluta, es más un símbolo histórico. Pero la nueva generación de barberos no vive de historia, vive del presente y de lo que sirve. Por eso muchos están volteando a ver a VGR, Wmark, Kemei, Babyliss y Stylecraft, porque son las que están demostrando que el futuro del corte no siempre trae apellido americano, a veces trae innovación que nació en otro lado y que se gana su lugar a base de resultados.
La barbería es evolución, y el que se duerme, pierde. No importa si tu máquina trae un nombre famoso o no: lo importante es que cuando la prendes y la pones en la piel, te responda como se debe. Ese es el verdadero respeto en la barbería: el que se gana en la práctica, no el que se hereda en la fama.