29/08/2025
                                            Cristo ha terminado por completo toda Su obra por nosotros. ¡Qué dulce alivio! Todas nuestras obras son defectuosas, y todos nuestros deberes son imperfectos. 
Hay mucha vanidad e insolencia en nuestros mejores esfuerzos. Pero aquí hay un gran alivio: Cristo ha terminado toda Su obra, aunque nosotros no terminemos ninguna de las nuestras.
Somos criaturas pobres e imperfectas en nosotros mismos, pero estamos completos en Él (Colosenses 2:10).
~John Flavel.                                        
 
                                         
   
   
   
   
     
   
   
  