
07/07/2025
Camilo Romero apoya una Constituyente, pero crítica fuertemente al presidente Petro por el irrespeto de los grupos armados hacia el gobierno.
Camilo Romero, exgobernador de Nariño y actual precandidato presidencial, manifestó su respaldo a una eventual Asamblea Constituyente, argumentando que debe “garantizar un Estado Social de Derecho” y salvaguardar la esencia de la Constitución de 1991.
Sin embargo, sus declaraciones han generado controversia al entrelazar su apoyo político con una defensa personal, y hablar de sus ingresos pasados como diplomático.
Durante su intervención en una emisora nacional, Romero expresó:
“Sí a una Constituyente… pero con líneas rojas: que se garantice el Estado Social de Derecho… y que no se pierda la esencia de la Constitución del 91. No vamos a quedarnos callados quienes buscamos un cambio en este país”.
Sin embargo, el mensaje político se vio opacado por su defensa de los recursos económicos obtenidos como embajador de Colombia en Argentina, cargo que ocupó durante dos años y medio:
"La liquidación del tema de la embajada… es lo que me permite hoy mantener a mis dos hijos y mi núcleo"
La mezcla entre discurso político y justificación económica levantó críticas en redes sociales, donde varios usuarios cuestionaron si Romero está usando su plataforma política para limpiar su imagen frente a temas personales.
Además, fue contundente al criticar la falta de voluntad de paz por parte del ELN:
"La violencia es la antítesis de la democracia. El diálogo se requiere… pero si la otra parte no tiene voluntad, como ha quedado claro con el ELN, no se puede permitir esta burla a los colombianos”.
Desde ya, llama al debate con “altura y argumentos”, también lanzó una dura crítica que puede ser interpretada como un cierre al diálogo con sectores insurgentes.
¿Qué tan coherente es Romero en su discurso?
Aunque defiende los principios democráticos y rechaza la violencia, su discurso parece caminar entre la búsqueda de transformación institucional y una inclinación personal que genera más dudas.