08/04/2022
¿QUÉ ELEMENTOS ESTÁN PRESENTES EN EL ESCENARIO APUESTA DE FUTURO QUE LOS DISTINTOS SECTORES DE BUENAVENTURA CONCERTAN?
En la visión de futuro al año 2040, los y las bonaverenses plantean: el cierre de brechas como un asunto de derechos, un modelo de ordenamiento territorial concertado que favorezca el goce efectivo de derechos y el cumplimiento de deberes, salvaguardando el patrimonio natural del Distrito: el agua, la flora, la fauna y la biodiversidad.
En el camino a 2040, los distintos sectores ven en el horizonte el florecimiento de una economía de producción limpia y el turismo sostenible como una alternativa que toma en cuenta la biodiversidad y su aprovechamiento responsable, el impulso a la transformación y comercialización agropecuaria, forestal y pesquera como fuente de generación de oportunidades.
En la visión al 2040 están también la industria local, la inversión extranjera y la actividad de las terminales portuarias, en crecimiento con responsabilidad social, comprometidas con las necesidades de la población y haciendo frente común con ellas para resolver los desafíos que son convenientes a todos: la protección de la vida, la seguridad y la paz territorial.
El desarrollo de las industrias creativas, las escuelas deportivas, artísticas y culturales, la educación superior, la formación para el trabajo, el desarrollo de las TIC, la innovación y el acceso al desarrollo del conocimiento ancestral y contemporáneo, son un frente de acción reiterado durante los espacios de diálogo en los que se plantea la atención al bienestar de Niños, Niñas, Adolescentes y Jóvenes siendo este grupo poblacional una prioridad en favor de la cual se ve necesario fortalecer la etnoeducación, el fortalecimiento del tejido social, la espiritualidad, la recuperación de las pautas de crianza y la transmisión de valores y prácticas culturales.
Como un componente para alcanzar condiciones de vida dignas y en paz en el futuro 2040, se identifica como un factor clave de Buenaventura al 2040, la articulación de los gobiernos propios de las comunidades étnicas, las organizaciones y movimientos de la sociedad civil, las entidades estatales, el sector privado y la academia, actores que fortalecidos institucionalmente logran la implementación de un modelo innovador de gobernanza en el que la toma de decisiones sobre políticas públicas, presupuestos e inversiones anuales sea el resultado del diálogo y la concertación.