23/09/2025
Crisis en el hospital de San Zenón: Se denuncia presunta corrupción y abandono al sistema de salud
La comunidad de San Zenón, Magdalena, se encuentra en alerta debido a la grave crisis que atraviesa el hospital local, marcada por denuncias de corrupción, mala gestión y represalias políticas. En lo financiero, el hospital presenta un déficit acumulado superior a los 2.200 millones de pesos, resultado de deudas heredadas de los políticos tradicionales, sumando la administración de la Fuerza del Cambio que sigue con las mismas prácticas de endeudamiento.
La actual gerente Johana Molina, no ha reportado ante las autoridades competentes las diferentes irregularidades encontradas, poniendo en juicio su transparencia para administrar. Así mismo esta administración se le señala de realizar contratos a personas que nunca llegan a realizar las labores, la contratación desmedida en temas de adecuación y mejoramiento de la infraestructura del hospital con un solo contratista, el señor Héctor Jiménez, sin embargo, para el pago de funcionarios que cumplen con su obligación como trabajadores de la salud les adeudan hasta tres meses de salario y en ocasiones solo pagan medio salario, bajo la consigna de que no hay presupuesto.
Otra presunta corrupción es el caso emblemático del exgerente (2024) Oscar Rincón, con antecedentes por corrupción en Tiquicio, Bolívar, y quien, por favores políticos, fue nombrado en la ESE local de San Zenón, quien junto a su mano derecha Kenia Larios, realizaron gastos desmedidos e injustificados de diferentes programas de Salud, entre ellos Equipos Básicos en Salud (Médico en tu casa), recursos enviados por el Gobierno Petro por más de 160 millones para la contratación de cinco equipos básicos, de los cuales si acaso opero uno de forma limitada.
Rincón es señalado por la comunidad por haber presuntamente adquirido equipos para la sala de maternidad y una unidad odontológica que nunca llegaron a destino, mientras que en su lugar la comunidad recibió una unidad odontológica de segunda mano.
Esta información puede ser confirmada a través de los contratos públicos que él gestionó durante su administración. La falta de transparencia y responsabilidad administrativa ha generado una profunda desconfianza entre los habitantes del municipio, quienes exigen investigaciones rigurosas y la intervención inmediata de los entes de control para poner fin a la corrupción, garantizar la correcta gestión de los recursos y asegurar una atención médica digna para todos. La situación sigue en desarrollo y mantiene en alerta a toda la población.
La situación en el hospital se complica aún más debido a la inestabilidad en su liderazgo, situación que contrasta con lo que se esperaría de un partido de izquierda coherente, que debería garantizar estabilidad laboral a sus empleados y denunciar cualquier acto de corrupción dentro de su gestión. Sin embargo, en este contexto electoral, la gerente Johana Molina, perteneciente a Fuerza Ciudadana, junto a sus dos principales aliados políticos —Cristina Fuentes Jiménez del Partido de la U y Luis Marcial Medina del Partido Conservador— han sido acusados de amenazar y presionar a trabajadores de la salud y manipuladoras de alimentos con la intención de despedirlos por motivos políticos.
Esta situación ha generado gran preocupación entre la comunidad y plantea la duda sobre si líder político de Fuerza Ciudadana, Carlos Caicedo está al tanto de estos hechos y cuál será su postura ante estas prácticas que ponen en riesgo la estabilidad laboral y el buen funcionamiento del hospital.