12/12/2025
El liberalismo entre pataletas, avales y corrupción.
Por: Gustavo Casadiego.
La democracia civilizada no solo se sostiene en la realización de procesos electorales, sino también en la consolidación de una cultura de respeto a la dignidad humana, la libertad y la igualdad. En ellas se protegen derechos fundamentales, entre los cuales se destaca el de elegir y ser elegido.
En Colombia, sin embargo, los partidos políticos se han convertido en una especie de plaza de mercado, pues otorgan avales al mejor postor de cara a la próxima contienda electoral para el Congreso (2026–2030). En pocas palabras, “come más harina el que más saliva tiene”, el que entendió, entendió.
El departamento de Norte de Santander ofrece el mejor ejemplo de la frágil dirigencia política, que se suma al mercantilismo practicado por los diferentes partidos, cerrando las puertas a candidatos que aspiran nuevamente a llegar al Congreso.
En los pasillos políticos se comenta que predominó el poder del dinero en la entrega de avales, incluso se afirma que se vendió la facultad de conformar la lista de aspirantes a la Cámara por el Partido Liberal a uno de sus propios integrantes.
Resulta evidente que, tras bambalinas, figuran el cuestionado Alcalde de Cúcuta Jorge Acevedo y el Senador liberal Alejandro Carlos Chacón, apodado ‘el niño de las pataletas’. Ambos serían los artífices del entramado de presiones y cabildeo que llevó a negar el aval al parlamentario Wilmer Guerrero Avendaño, a quien ven como una amenaza de mayor peso político.
Por último, resalto la serenidad y la capacidad de liderazgo del representante GUERRERO, indicando que Ocaña va a tener "un gran líder para largo plazo". ADELANTE.
