27/10/2025
NASA desmiente rumores sobre una supuesta nave alienígena que se acerca a la Tierra
Washington, — La NASA desmintió oficialmente los rumores que circulan en redes sociales sobre el objeto interestelar 3I/ATLAS, al que algunos han calificado como una posible “nave alienígena” en rumbo hacia la Tierra.
Según la agencia, el cuerpo celeste es un cometa natural y no representa peligro alguno para el planeta.
El objeto, detectado el 1 de julio por el sistema de alerta temprana ATLAS, con base en Chile, es apenas el tercer visitante interestelar conocido que atraviesa nuestro sistema solar, después de ʻOumuamua (2017) y Borisov (2019). Su paso ha despertado gran interés científico debido a su composición inusual y a su trayectoria hiperbólica, que lo llevará de regreso al espacio profundo.
“3I/ATLAS se ve como un cometa, actúa como un cometa y hace cosas de cometa”, afirmó Tom Statler, científico principal de cuerpos pequeños del sistema solar en la NASA. “Todas las evidencias apuntan abrumadoramente a que se trata de un objeto natural”.
Las aclaraciones llegan tras las declaraciones del astrónomo Avi Loeb, de la Universidad de Harvard, quien planteó en un artículo académico la posibilidad de que el cuerpo fuera un artefacto tecnológico de origen desconocido.
Sus hipótesis —según las cuales 3I/ATLAS podría estar realizando maniobras ocultas detrás del Sol— generaron una ola de teorías en redes y portales sensacionalistas que hablaban de una “nave hostil rumbo a la Tierra”.
La NASA desmintió dichas versiones. Según sus cálculos orbitales, el cometa no se acercará más de 273 millones de kilómetros a nuestro planeta, distancia considerada completamente segura.
Además, observaciones realizadas con el telescopio espacial James Webb confirmaron que su cola contiene dióxido de carbono, agua y polvo, materiales comunes en los cometas del sistema solar.
Los astrónomos continúan observando a 3I/ATLAS para entender mejor su comportamiento y sus posibles aportes al estudio del espacio interestelar, pero descartan cualquier relación con tecnología extraterrestre.
“Los objetos extraños merecen ser estudiados con rigor, no con miedo”, concluyó Statler.
