15/10/2024
La magia de los tejedores ancestrales: Tradición e innovación en el arte textil colombiano
Por: Juan Sebastián Chaves Gil
En las manos de Luz Dary, una mujer Wayúu de la Guajira, los hilos de colores parecen tener vida propia. Sus dedos, ágiles y precisos, se entrelazan como si bailaran al ritmo de una música ancestral que solo ella puede oír. Cada puntada cuenta una historia, cada patrón es un reflejo de la naturaleza, de la cosmovisión de su pueblo. El telar, rudimentario pero lleno de simbolismo, es su herramienta de conexión con los ancestros.
"Nosotras no tejemos solo por necesidad, tejemos para que no se olviden de nosotros", dice Luz Dary, mientras sus ojos recorren la pieza en la que trabaja. Su trabajo no es solo un tejido, es un testimonio de su identidad, un grito de resistencia ante la modernidad que amenaza con diluir las tradiciones.
Pero la magia no se detiene ahí. A kilómetros de distancia, en una vibrante Bogotá, una joven diseñadora, Camila Torres, experimenta con los mismos patrones. Su taller, lleno de máquinas modernas y telas suaves, parece otro mundo. Sin embargo, cuando Camila toma los hilos, el pasado y el presente se encuentran. Ella transforma los símbolos milenarios en ropa de alta costura, llevando al mundo los secretos que las comunidades indígenas han tejido durante siglos.
"Quiero que el mundo vea lo que hay detrás de estos patrones. No es solo moda, es cultura, es vida", explica Camila mientras da las últimas puntadas a un vestido que bien podría haber salido de los sueños de una artesana ancestral.
Así, la tradición y la innovación se entrelazan, creando un tejido común donde lo antiguo y lo nuevo dialogan. Los tejedores ancestrales, como Luz Dary, y los artistas contemporáneos, como Camila, nos recuerdan que el hilo que une al pasado con el futuro sigue intacto, tan fuerte como siempre.