
24/06/2025
«Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación.»
► Romanos 10:10
Un viejo refrán que hemos aplicado en diversas situaciones de nuestra cotidianidad es: «Ver para creer».
Pero cuando se trata de vivir conforme a cómo fuimos llamados, hijos de Dios, el refrán es completamente al revés: «¿No te he dicho que “si crees, verás” la gloria de Dios?»
«Porque en el evangelio la justicia de Dios se revela por fe y para fe, como está escrito: Mas el justo por la fe vivirá.»
Romanos 1:17
Si deseas que tu vida y las circunstancias sean el efecto del poder y gracia del orden divino actuando en ti, deberás creer, tener fe, antes de poder ver.
Si solo te limitas a ver para creer, cuando veas lo más seguro es que no estés listo para recibir lo que vendrá, y quedarás con un sabor agridulce por no haber disfrutado tu bendición completamente, o por no alcanzarla.
Ahora bien, si deseas vivir por fe (creer para ver), entonces deberás saber que no es suficiente solo creer en tu corazón para recibir tu respuesta. Tendrás que agregar el otro elemento importante que la Biblia enseña: la confesión.
«Que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los mu***os, serás salvo.»
Romanos 10:9
Punto de acción:
Siempre se ha dicho que para ir del punto A al punto B, lo mejor siempre es una línea recta. Entonces, si hoy Dios te desafía a cambiar una situación en especial, traza la línea recta con el lápiz de la fe y la tablilla de la confesión. PD: Cuánto crees = Cuánto oras.
Lectura bíblica necesaria:
Romanos 10