27/07/2025
Bueno, no puedo hablar mal de esta película.
No es genial, pero no la echaron a perder y eso (para Disney/Marvel), ya es decir mucho.
No hay spoilers en este comentario. Sí puedo decirles que la trama me sorprendió.
No porque diera algún giro loco de esos que te deja boquiabierto como el Sexto Sentido con Bruce Willis; sino porque enfocaron de forma muy tradicional el concepto de familia. Principalmente el tema de maternidad de Sue Richards hacia su hijo. Y digo que quedo sorprendido porque conociendo la abierta, nada oculta y vulgar agenda de anti valores de Disney en los últimos 10 años, permitieran de alguna forma un mensaje pro vida y de preservación y protección de un bebé antes que el de su seguridad propia o la de los demás.
El que una compañía abiertamente “Woke” presente esto, me indica la situación probablemente desesperada y peligrosa económicamente que está atravesando en estos momentos el castillo del ratón. Las pérdidas millonarias una tras otra y tras otra por meter a la brava la “inclusión forzada” (que nadie solicita en una película), parece que les ha torcido el brazo al punto de tener no solo que eliminar cualquier indicio de ser “políticamente correctos” en Los 4 Fantásticos Primeros Pasos, si no el tener que incluir un mensaje que a mi parecer es tradicional, tierno y loable como el tema de dar paso a una vida nueva en una cultura pro ab**to, sumando el sentido protector de maternidad que se ha vendido en nuestros días como opresión machista sobre la mujer (por el cuido de los hijos).
No escatimaron en presupuesto. Los efectos visuales, el diseño estilo retro futurista, Galactus y el despliegue visual de su increíble presencia… la forma en que resuelven cómo enfrentarse a casi un dios devora mundos donde ni la fuerza ni los poderes definitivamente van a lograr vencerle (como si unas cucarachas pudieran derrotar a un ser humano en la realidad), es de ir al cine la verdad para no dejarlo pasar.
Les está yendo bien en taquilla, que es lo que estas compañías de re ingeniería social (ya no entretenimiento), les quedará entender. O a nosotros aprender que si queremos evitar que sigan destruyendo lo que es bueno y digno, demos la espalda a lo que no nos parece o gusta en sus entregas.