13/01/2025
Declarar y decretar
Hace unos años se empezó a usar mucho el término declarar y decretar, más que todo en hacer oraciones tipo profético.
Declarar, tiene que ver con decir, proclamar.
Decretar tiene que ver con ordenar, mandar.
Como en todo hay que tener un equilibrio.
Más que las palabras que usamos, es la actitud conque lo hacemos ( aunque la palabra “yo decreto” es de cuidado)
Aun cuando ordenamos al diablo soltar a alguien, lo hacemos con autoridad, pero con humildad delante del Señor, sabiendo de donde viene esa autoridad.
Hay veces hay orgullo y prepotencia.
Es cierto que debemos tener cuidado con nuestra forma de hablar según nos muestra la Biblia.
Que en nuestra lengua está el poder de la muerte y de la vida; que daremos cuentas por las palabras que decimos; que nuestras palabras deben ser con gracia y que todo lo que digamos debe, en última instancia, glorificar a Dios. Pero debemos de tener cuidado de andar por aquí y por allá declarando o decretando, dejando de lado la soberanía de Dios.
También es importante proclamar la Palabra de Dios en fe y autoridad, según hemos recibido del Señor, pero siempre con una actitud de humildad respetando la voluntad del Señor y Su soberanía.
Hace unos años en las redes sociales una hermana muy conocida y con muy buena intención hizo una oración por un enfermo y dijo al Señor…. "No acepto un no como respuesta". Creo que lo hizo por el amor que tenía a esa persona enfermita, que por cierto, partió con el Señor poco tiempo después.
Muchos la criticaron y juzgaron muy duramente, y me parece que terminaron cometiendo un pecado mayor que el de ella ( todos nos hemos equivocado con buenas intenciones )
Debemos de orar como dijo el Señor:
…. Hágase tu voluntad
Hay que tener cuidado como manejamos esto, de lo contrario podemos llevarnos grandes decepciones, o llenarnos de orgullo, creyendo que Dios me responde solo porque decreto y declaro y no por Su gracia.
La alternativa bíblica a la práctica de decretar y declarar, es la oración de fe, sumisa, perseverante y ferviente. La oración que levanta con humildad su petición al Señor, que confía en Su soberanía, que descansa en su buena voluntad y que concluye con acción de gracias.
Por ejemplo, cuando los creyentes de la iglesia primitiva fueron intimidados por las autoridades del templo para no predicar, ellos oraron unánimes a Dios y le pidieron por valor: Y ahora, Señor, considera sus amenazas, y permite que tus siervos hablen tu palabra con toda confianza… Hechos 4:29
El apóstol Pablo exhortaba a los creyentes de Filipos a no afanarse por nada, » antes bien, en todo, mediante oración y súplica con acción de gracias, sean dadas a conocer vuestras peticiones delante de Dios» Filipenses 4:6
Asimismo, nuestro Señor nos dejó un gran modelo a este respecto y una enseñanza clara acerca de la oración. Cuando agonizaba en Getsemaní antes de su arresto, oró «diciendo: Padre, si es tu voluntad, aparta de mí esta copa; pero no se haga mi voluntad, sino la tuya…Lucas 22:42
¡Recordemos que Su voluntad es buena agradable y perfecta!