
22/09/2025
🐻En Estados Unidos, en la zona de Lake Tahoe, una heladería abrió un día normal… hasta que entró un cliente inesperado. No traía cartera ni prisa: era un enorme oso negro.
El animal se metió detrás del mostrador y como si nada, empezó a probar helados. Y sí, parece que tenía buen gusto: su sabor favorito resultó ser la fresa. Tan claro quedó, que ya lo apodaron “straw-bear-y”.
Cuando llegó la policía del condado, no hubo persecución ni escándalo. Con un poco de paciencia y algo de ánimo, lograron que el oso saliera por su propio pie, como si solo hubiera ido por un antojo.
La tienda tuvo que desechar varios helados por seguridad, pero los dueños lo tomaron con humor: “Fue la visita más grande que hemos tenido”.