13/06/2025
|| Encuentran sin vida a joven chileno tras cita con médico ecuatoriano; investigan circunstancias del caso
Un joven farmacéutico de 21 años, identificado como Francisco Javier Albornoz, desapareció el 23 de mayo pasado tras salir de su departamento en Ñuñoa, Santiago, para encontrarse con una persona que conoció por una aplicación de citas. Su última señal geolocalizada lo situó en el entorno de Plaza Egaña, y desde ese momento no se supo más de él hasta el trágico desenlace.
El cuerpo de Francisco fue encontrado el 3 de junio en una quebrada cercana al río Tinguiririca, en la comuna de Placilla, región de O’Higgins, envuelto en una frazada y en avanzado estado de descomposición. La investigación señaló que sus restos fueron trasladados desde Santiago, lo que apunta a un encubrimiento deliberado.
El giro en el caso ocurrió cuando se entregó voluntariamente ante la Fiscalía de Ñuñoa el médico ecuatoriano Christian Alexander González Morales, de 31 años, egresado de la Universidad de Guayaquil y habilitado para ejercer en Chile desde agosto de 2023. Su confesión fue clave para que la Policía de Investigaciones (PDI) ubicara el cuerpo de la víctima. González fue formalizado como imputado y posteriormente desvinculado de su puesto en la Corporación Municipal de Desarrollo Social de Ñuñoa.
Según la versión preliminar del abogado del médico, la muerte de Francisco habría ocurrido de manera accidental durante una “noche en que las cosas salieron mal”, posiblemente tras consumir sustancias en un departamento junto a otras personas. Se presume una intoxicación o infarto, sin signos de agresión directa; sin embargo, el traslado del cuerpo a una zona aislada ha elevado las sospechas y las indagaciones del Ministerio Público continúan en curso.