02/08/2025
Cuatro expolicías —hombres que alguna vez juraron proteger— fueron arrestados por proteger a criminales. Por venderle al enemigo lo que juraron defender. Y por primera vez en mucho tiempo, no se les encubrió. Se les detuvo.
Pero esto no se trata solo de ellos.
Esto se trata de nosotros.
De en qué tipo de país queremos vivir.
Y en Puebla no solo hubo un cambio de gobierno, hubo un cambio de conciencia.
Un cambio de valores.
Un cambio de rumbo.
Porque cuando un gobierno deja de proteger a los corruptos y empieza a proteger al pueblo,
eso ya no es política, eso es justicia.
Y si hoy se atrevieron a detener a los que antes eran intocables,
entonces mañana sí podemos creer que las cosas pueden cambiar
Alejandro Armenta no solo es el gobernador.
Es el puente. El puente entre lo que fuimos, y lo que podemos ser.
Entre la impunidad que nos rompía por dentro, y la justicia que, aunque llega tarde, todavía puede sanar.
Tal vez por fin estamos entendiendo qué significa vivir en paz: No es vivir sin problemas.
Es vivir sin miedo a quien debería cuidarte. Es mirar a un policía y saber que está de tu lado.
Es confiar, otra vez, en la ley.
Hoy en Puebla ganó la gente.
Hoy ganó la verdad
Y si seguimos por este camino, mañana también podría ganar la esperanza.
