14/07/2025
Le Bayadère exalta con el brunch la comida dominical parisina
By Enric Ribera Gabandé
En un ambiente elegante y moderno, el chef Khalid Mansour, galardonado por la guía Gault & Millau, ofrece una cocina francesa creativa
Un edificio haussmanniano en el prestigioso distrito 8 de París, a un paso de los Campos Elíseos, es un excelente argumento para localizar un hotel de lujo, y el Hôtel Elysia lo aprovecha al máximo. El tamaño de éste es algo reducido, lo que le confiere una tranquilidad casi residencial, aunque sus habitaciones y suites, con sus finos tejidos y su refinada decoración, son inconfundiblemente lujosas. Las vistas desde las ventanas varían, y cada una de ellas está decorada con una obra de arte central que enmarca una escena parisina clásica. Un pequeño spa en la planta baja es un placer bienvenido, al igual que el bar y el restaurante Le Bayadère, con temática de ballet.
Le Bayadère
El restaurante y bar Le Bayadère seduce a sus clientes con el elegante homenaje a la danza, con su amplia selección de refrigerios. En un ambiente elegante y moderno, el chef Khalid Mansour, galardonado por la guía Gault & Millau, ofrece cocina francesa creativa. Cada plato, preparado por el equipo de cocina, se elabora con ingredientes de temporada seleccionados según su etiqueta Ecotable, que sin duda deleitan el paladar de los comensales; una auténtica invitación a un festín culinario inolvidable.
El brunch, la comida dominical que ahora se considera básica en París y que combina el desayuno y el almuerzo, tiene sus raíces en la Inglaterra del siglo XIX. Durante la época victoriana, la alta sociedad británica solía dormir hasta tarde después de una noche de sábado de entretenimiento. En lugar del tradicional desayuno temprano, preferían disfrutar de una variedad de platos que combinaban los sabores del desayuno y el almuerzo, servidos entre la mañana y el mediodía. Así, de esta fusión de comidas nació el brunch, ofreciendo una opción deliciosamente indulgente para comenzar el domingo.
Este concepto se popularizó en Estados Unidos a finales del siglo XIX y principios del XX. Los neoyorquinos adinerados adoptaron esta tradición, a menudo como una reunión social informal después de su visita dominical a la iglesia. Con el tiempo, el brunch se popularizó y se hizo accesible a un público más amplio, y ahora se disfruta en muchas culturas de todo el mundo.
Brunch en Le Bayadère
En este brunch cerca de los Campos Elíseos, con 7 pases que incluyen bebidas y platos, se encuentra una selección completa para satisfacer todos los gustos. La reputación internacional de Francia por sus pasteles y panaderías se ve avalada por una deliciosa variedad de bollería y una selección de panes frescos para tostar con sabores tentadores como mermelada, mantequilla y miel. Para una auténtica experiencia de brunch, son imprescindibles los huevos Benedict con aguacate fresco o tocino crujiente, con el fin de deleitar el paladar.
Foto Nº 1,- El chef Khalid Mansour.
Fotos Nº 2, 3 y 4,- Cocina del restaurante de París.
Foto Nº 5,- Los firmantes de este reportaje.
Enric RIBERA GABANDÉ
Pilar Rius Colom