04/07/2025
"Novio corito a la fuga"
(Dichos de nuestros mayores)
Sin llegar tan lejos como la buena de Julia Roberts en la celebrada cinta de Garry Marshall, parece que también aquí en nuestro pueblo en fechas no tan lejanas, llegó a darse el caso de que alguno de los futuros contrayentes, en esta ocasión el novio, antes de dar el «Sí quiero», sintiera que le flaqueaban las carnes y se le encogía el corazón; lo que hizo que se lo pensara mejor y tuviera la tentación de echarse para atrás a tiempo.
Alguna vez escuchamos referir el caso de aquel que alegó como excusa la falta de cuartos y el miedo de no poder mantener a la futura consorte para intentar escapar del casorio. Mas, después de muchas cavilaciones, sermones de la madre, algún que otro pescozón del padre y no pocos consejos de la familia; el mozo, vencido y encogido, acabó entrando por el aro.
Parece que hubo todavía otro, más osado que el anterior, que podría haberse ido con viento fresco, dejando a la novia compuesta, al cura con la sotana planchada y a todos sin el convite.
No sabríamos deciros en qué acabó tal sainete, aunque al menos sí que quedó constancia por este dicho que durante algunos años perduraría en corrillos y veladas del pueblo, y que decía más o menos así:
“Después de las camas hechas
y las sillas de rejilla,
ahora dice el de Barrena*
que no se mete a la trilla”.
¡Ay, si entonces hubiésemos tenido esas redes sociales que ahora todo lo atrapan y todo lo airean!
Sin animo de molestar y tal como lo recordamos, lo hemos contado. 🤔
(*) Hemos cambiado el nombre para que nadie pueda jugar a las adivinanzas. 🤠
La imagen ha sido generada por IA