05/10/2025
La comisión de la Falla Almirante Cadarso–Conde de Altea ha protagonizado un acto cargado de emoción y compromiso social con la firma de un acuerdo de colaboración solidaria con la Fundación Aladina, entidad dedicada desde 2005 a acompañar a niños y niñas con cáncer y a sus familias en los momentos más difíciles de la enfermedad.
El acto, celebrado en el casal de la comisión, ha contado con la presencia de destacadas personalidades del mundo fallero y de la Fundación Aladina. Entre los asistentes han estado Santiago Ballester, presidente de Junta Central Fallera; Alberto de Marco, vicepresidente de JCF; Lucía García, Fallera Mayor Infantil de València 2025, junto a su Corte de Honor; Ana Dávila, directora de Comunicación de la Fundación Aladina; Eva Robles y Lara Monzón, del equipo de voluntariado de la Fundación en València; así como Rafael Ferrando, presidente de la Agrupación Pla del Remei – Gran Vía, falleros y amigos.
Durante el encuentro, Lucía García dirigió unas palabras en las que destacó la importancia de unir la fiesta fallera con iniciativas solidarias que generen un impacto real en la sociedad. Por su parte, el presidente de Junta Central Fallera, Santiago Ballester, subrayó el papel fundamental de las Fallas como motor social y solidario, y mostró el respaldo institucional a esta alianza.
La comisión explicó que esta colaboración no persigue recursos ni protagonismo, sino poner al servicio de la causa la fuerza, la visibilidad y el corazón de la comunidad fallera. “Queremos que el pañuelo de colores de Aladina, símbolo de compañía y esperanza, ocupe también un lugar entre nuestras flores, nuestros ninots y nuestras mascletàs”, afirmaron durante la presentación.
La Fundación Aladina, creada por el cantante, productor y filántropo Paco Arango, lleva dos décadas transformando hospitales y acompañando emocionalmente a miles de familias. Entre sus proyectos más destacados está la reforma integral de la UCI infantil del Hospital Niño Jesús en Madrid y su presencia activa en la Unidad de Oncología del Hospital La Fe de València, donde trabaja la enfermera Carolina Blanco, fallera de la propia comisión.
Durante el acto se compartió la historia de Riham, una niña siria refugiada que, gracias al apoyo de la Fundación Aladina, pudo superar un tratamiento de quimioterapia de más de un año. Su testimonio fue un recordatorio vivo de que la solidaridad salva vidas.
Cada año, la Fundación Aladina acompaña a más de 2.000 niños y niñas en 22 hospitales de toda España, ofreciendo apoyo psicológico, humano y material, y recordándoles que no están solos.
La Falla Almirante Cadarso–Conde de Altea se ha comprometido a dar visibilidad a la causa a través de sus actos, redes sociales, llibrets y espacios, y a implicar a todo el mundo fallero en esta colaboración solidaria. Además, invitaron a las familias y a los pequeños pacientes a participar en la fiesta fallera durante el próximo mes de marzo, con los brazos abiertos.
“En las Fallas sabemos que cuando encendemos la mecha de la solidaridad, la esperanza ilumina el cielo de todos”, concluyeron los representantes de la comisión