14/11/2025
Gracias a todas las personas que habéis participado para Hacer posible este relato ha sido un placer unir todo ese puzzle de vuestros comentarios para construir lo que a continuación os presento vuestra propia creación...
Título..: "Es hora de partir".
«Antes de elegirme, lo dudé un instante», confiesa una voz dentro de mí.... Y es que no es fácil llenar la maleta de sueños que durante tanto tiempo depositamos en otros.
Pero un día, algo cambia. Te sientas sobre esa maleta, no para huir, sino para encontrarte. Y descubres, como Rosa, que «deberías dejar que la naturaleza te envuelva en su magia, escuchar el canto de los pájaros y sentir la libertad que solo ella puede dar».
🧳 La maleta ya no pesa, porque dejamos atrás lo que nos restaba lo que no nos hacia falta.
Como bien dice Casa y Encanto, salimos de «aquel lugar donde tus emociones eran ignoradas». Al principio, como Tania, sentimos miedo: «miedo a la libertad y a usar mis alas».
Pero entonces, miramos al cielo, como Ana Karina, y «salimos de nosotros, volamos más allá» de nuestras propias palabras.
🧚♀️ Porque, como dice Eva López, «de nada sirve ser libre para volar si el corazón no se ha dado cuenta que las alas son suyas y el cielo no tiene dueño».
Y así, un día, tomamos la decisión. Como Isabel Nendó, respiramos al fin y sentimos el viento en el rostro. O como Verónica, entendemos que la vida misma nos dará las respuestas mientras volamos a nuestra propia velocidad.
Llenamos la maleta solo con lo esencial: ilusiones, esperanzas y esos recuerdos que, como Conchi nos cuenta, «nos hacen sonreír y también llorar, pero son nuestros».
✈️Y emprendemos el viaje.
Un viaje, como dice Alejandra, lleno de «colores, alegrías, sueños, esperanza y también desengaños».
Pero todo es parte del camino. Un camino donde, como canta Magnolia, volvemos a conectar con la naturaleza y con esa niñez que nunca debimos perder.
🕊 Porque volar, como reflexiona Juanita, "es aprender a dejar ir.
Es soltarse el cabello", como Geminis, "y vestirse de retazos para llevar el arcoíris consigo".
Es, como Rosita, "extender las alas aunque al principio cueste, confiando en que el viento nos ayudará a seguir".
Y aquí estamos. Como Gladys, "nutriéndonos del sol". Como Ariana, "siendo por fin nuestra nueva versión". Con la maleta ligera y el corazón liviano, listas para vivir, como dice Arays, «poniéndonos los colores más bellos» y dándonos el lujo de ser, por fin, dueñas de nuestra propia vida.
©Jose Luis Vaquero y compañeras/os de sal fuera de ti.