11/10/2025
Más de 5.100 alegaciones al Polígono Eólico Briesa evidencian un rechazo social masivo ante la industrialización de los Valles Pasiegos
-El reloj administrativo marcó hoy el final del plazo de alegaciones al Polígono Eólico Briesa y su entramado de subestaciones y líneas de alta tensión
En apenas un mes, la Plataforma Son Gigantes junto con el grupo vecinal No Subestación Arenal han reunido 5.108 alegaciones, que se sumarán a las presentadas por distintos colectivos de la comarca.
Solo en el grupo de trabajo de El Arenal (Penagos) se recogieron cerca de 3.000 alegaciones, un esfuerzo vecinal que confirma el segundo gran hito ciudadano impulsado por la plataforma, tras la movilización de miles de personas en el anterior polígono de Benavieja.
Hace pocos días, el 28 de septiembre, más de 500 personas de todas las edades y diversas localidades se reunieron en los prados de El Arenal de Penagos, donde está proyectada la subestación de Saguales, epicentro del corredor energético que pretende unir Burgos con la costa cántabra. Allí, la palabra “NO” se dibujó con cuerpos y convicción.
Fue un no colectivo a un modelo de industrialización del medio ambiente, pero también un sí —rotundo— a todo lo que hoy se pone en riesgo en los Valles Pasiegos: el paisaje, la biodiversidad y la forma de vida rural que les da sentido, un patrimonio natural y cultural que es también su identidad y su futuro.
“Nuestra oposición no es ideológica; se fundamenta en el principio jurídico del interés superior del menor, reconocido por la Convención sobre los Derechos del Niño (ONU, art. 3) y la legislación española, que obliga a que toda decisión que afecte a niños y niñas priorice su protección, salud y bienestar”, recogía el manifiesto del AMPA del CEI Ambrosio Díez Gómez leido por su presidente, Roberto Valois Martínez.
“Entre aquel gesto y las alegaciones hay una misma intención: como ocurre en la naturaleza, también las personas nos unimos para defender lo que nos da vida. La movilización no es dispersa: es un mapa social de resistencia donde se cruzan voces distintas —alumnado y familias, vecindad y comercios, ayuntamientos y profesionales— unidas por la misma idea de cuidado” han señalado desde la Plataforma Son Gigantes y el grupo No a la Subestación del Arenal
El Polígono Eólico Briesa, promovido por Tesera Energía 8, S.L.U. (Grupo Villar Mir), proyecta 19 aerogeneradores de 170 metros en Espinosa de los Monteros y Merindad de Montija (Burgos), evacuando su energía a través de más de 40 kilómetros de líneas de 220 kV y una compleja red de subestaciones: Briesa, Saguales (Penagos), Mustera (Villaescusa) y El Astillero 220. Los municipios afectados por PE Briesa son Vega de Pas, Villacarriedo, Saro, Santa María de Cayón, Penagos, Villaescusa y El Astillero.
Las acciones de información, la recogida y la preparación de alegaciones técnicas y jurídicas fueron coordinadas por la Plataforma Son Gigantes junto al grupo No a la Subestación del Arenal, con el apoyo de múltiples entidades locales.
En total, participaron quince localidades del tejido territorial y se habilitaron más de veintiocho puntos de recogida, situados en seis ayuntamientos, comercios, negocios de restauración y otros espacios locales. Ese dato no solo representa volumen: refleja una conciencia territorial que crece frente a un modelo de planificación energética que no escucha. Y si las administraciones no atienden este clamor, el fracaso no será de la ciudadanía.
Un territorio agredido por proyectos fragmentados
La Plataforma Son Gigantes continúa su trabajo frente a los nuevos proyectos eólicos Las Américas 3 y Las Américas 16, promovidos por Arena Green Power (13 y 14, respectivamente) y actualmente en información pública hasta el 7 de noviembre.
Las Américas 16 de 49,99 MW, se proyecta en los términos municipales de Vega de Pas, Villacarriedo, Selaya, Santa María de Cayón, Saro, Villaescusa, Penagos y El Astillero.
Y Las Américas 3, también de 49,99 MW, afectaría a Santa María de Cayón,Villaescusa, Penagos y El Astillero, además de Villafufre y Santiurde de Toranzo.
Ambos proyectos impactarían directamente en enclaves de alto valor paisajístico, cubriendo de estructuras metálicas el puerto de La Braguía y el monte Caballar. A su vez, comparten trazado y parte de la infraestructura de evacuación con Briesa, acumulando su impacto en la zona de Penagos, donde se proyecta la subestación de nueva construcción de Saguales, convertida en n**o central dentro del corredor eléctrico que atraviesa los valles y punto de mira con el Centro de Datos Altamira.
La potencia de ambos proyectos, fijada en 49,99 MW, queda justo por debajo del umbral de 50 MW que transferiría la competencia al Estado (MITECO), lo que refuerza la sospecha de una fragmentación deliberada.Una práctica que contradice el sentido de la Ley 21/2013 de Evaluación Ambiental, concebida para evaluar los impactos de forma conjunta y evitar que lo que parece pequeño por separado acabe siendo, en conjunto, una transformación mayor e irreversible del territorio.
Mientras tanto, el eco de las más de 5.000 alegaciones y movilizaciones suenan como una advertencia clara: los valles no son territorio de paso para la energía de empresas privadas.
No se trata de negacionismo climático, “sino de defender una transición energética justa, que respete los territorios, su escala y a las comunidades que los habitan. Nuestros valles son hogar, paisaje, memoria y future” han señalado-
“Este rechazo social reclama una planificación con visión territorial, el respeto al derecho a decidir local y la obligación de considerar los impactos acumulativos antes de seguir ocupando el territorio”, han manifestado por último