30/10/2025
¿Un Romanticismo letal?
¿Puede un arte acabar con los cuerpos reales? Hace solo un par de semanas, el musicólogo, crítico y erudito Luis Gago compartió, hacia el final de una conferencia sobre Thomas Mann y su conexión con la música, su más terrible sospecha: parafraseando, que el Romanticismo fue la auténtica causa de que Alemania emprendiera ese suicidio colectivo que condujo al nazismo y a la guerra. Si cambiamos la música por el psicoanálisis, como forma de pensar el arte y la historia, la idea no anda lejos de las conclusiones del teórico madrileño Jesús González Requena, quien ha rastreado las huellas del nazismo en el expresionismo alemán previo a la Segunda Guerra Mundial. Y todo en diálogo con el pensamiento de Siegfried Kracauer que encontró en la historia y las formas de "El gabinete del Dr. Caligari "de 1920 la prefiguración de un nazismo a la vuelta de la esquina.
Con todo esto en mente, quisimos recordar a dónde se fue a buscar Elisenda N. Frisach, en su prólogo a nuestro libro "SOLARIS #8 Monstruos" (2022), el origen de ciertos monstruos del cine y en el fondo no nos sorprendió encontrar en su texto la sospecha del Romanticismo:
"No es casualidad, en esta línea, que el nacimiento de la novela gótica —la narrativa de los monstruos por excelencia— se produjera de la mano del Romanticismo, habida cuenta de que, si bien las figuras monstruosas han existido desde tiempos inmemoriales en el folclore de todas las culturas del planeta, en manos de los creadores románticos se transforman en símbolos de ese amargo don que es el carecer de figuras paternas: la libertad." (p. 22)
Como ven, Elisenda N. Frisach comienza refiriéndose a los personajes de ficción, pero en la misma frase apunta ya a estos como un reflejo de algo real que le sucede a los humanos de carne y hueso. ¿Acaso no es la ficción el espacio donde se refleja la verdad de lo que nos sucede como humanos?
* artículo completo en nuestra web
https://solaristextosdecine.com/un-romanticismo-letal/