06/12/2025
𝗖𝗼𝗻𝘁𝗿𝗼𝗹 𝗱𝗲 𝗥𝗲𝗰𝘂𝗿𝘀𝗼𝘀 𝘆 𝗥𝗲𝗴𝘂𝗹𝗮𝗰𝗶𝗼́𝗻 𝗦𝗼𝗰𝗶𝗮𝗹: 𝗜𝗻𝘁𝗲𝗿𝗽𝗿𝗲𝘁𝗮𝗰𝗶𝗼́𝗻 𝗘𝘁𝗼𝗹𝗼́𝗴𝗶𝗰𝗮 𝗱𝗲 𝘂𝗻 𝗣𝗮𝘁𝗿𝗼́𝗻 𝗖𝗼𝗺𝗽𝗹𝗲𝗷𝗼
“Los personajes y eventos representados son ficticios. Cualquier parecido con la realidad es coincidencia no intencionada.”, 𝗽𝗲𝗿𝗼 𝘁𝗿𝗮𝗻𝗾𝘂𝗶𝗹𝗮𝗺𝗲𝗻𝘁𝗲 𝗽𝘂𝗲𝗱𝗲𝗻 𝗳𝗼𝗿𝗺𝗮𝗿 𝗽𝗮𝗿𝘁𝗲 𝗱𝗲 𝘁𝘂 𝗱𝗶𝗮𝗿𝗶𝗼.
𝗟𝗮 𝗵𝗶𝘀𝘁𝗼𝗿𝗶𝗮 𝗱𝗲 𝗠𝗶𝗹𝗸𝗮.
Milka es una perrita que vive con una familia formada por dos adultos y dos adolescentes. Lleva tres años en ese hogar y, con el tiempo, 𝘃𝗮 𝗶𝗱𝗲𝗻𝘁𝗶𝗳𝗶𝗰𝗮𝗻𝗱𝗼 𝗰𝗶𝗲𝗿𝘁𝗼𝘀 𝗼𝗯𝗷𝗲𝘁𝗼𝘀 𝗾𝘂𝗲 𝗽𝗮𝗿𝗲𝗰𝗲𝗻 𝘁𝗲𝗻𝗲𝗿 𝗿𝗲𝗹𝗲𝘃𝗮𝗻𝗰𝗶𝗮 𝗽𝗮𝗿𝗮 𝗹𝗮 𝗳𝗮𝗺𝗶𝗹𝗶𝗮.. Entre ellos está su cuenco de comida, pero también mandos a distancia, prendas de ropa que quedan en el sofá o unas zapatillas usadas con frecuencia.
De forma progresiva, Milka 𝗲𝗺𝗽𝗶𝗲𝘇𝗮 𝗮 𝗮𝗰𝗲𝗿𝗰𝗮𝗿𝘀𝗲 𝗮 𝗲𝘀𝘁𝗼𝘀 𝗼𝗯𝗷𝗲𝘁𝗼𝘀 𝘆 𝗮 𝗺𝗮𝗻𝘁𝗲𝗻𝗲𝗿 𝗰𝗶𝗲𝗿𝘁𝗼 𝗰𝗼𝗻𝘁𝗿𝗼𝗹 𝘀𝗼𝗯𝗿𝗲 𝗲𝗹𝗹𝗼𝘀. A veces los desplaza, otras los guarda o simplemente se coloca cerca. En algunas ocasiones, cuando la familia intenta recuperar uno de esos objetos, 𝗠𝗶𝗹𝗸𝗮 𝗺𝘂𝗲𝘀𝘁𝗿𝗮 𝗰𝗼𝗺𝗽𝗼𝗿𝘁𝗮𝗺𝗶𝗲𝗻𝘁𝗼𝘀 𝗮𝗴𝗿𝗲𝘀𝗶𝘃𝗼𝘀 𝗱𝗶𝗿𝗶𝗴𝗶𝗱𝗼𝘀 𝗮 𝗹𝗼𝘀 𝗿𝗲𝘀𝗽𝗼𝗻𝘀𝗮𝗯𝗹𝗲𝘀. Estas respuestas no aparecen siempre, pero cuando lo hacen siguen un patrón claro asociado al control de los recursos.
Con el tiempo, 𝗲𝘀𝘁𝗲 𝗺𝗶𝘀𝗺𝗼 𝗰𝗼𝗺𝗽𝗼𝗿𝘁𝗮𝗺𝗶𝗲𝗻𝘁𝗼 𝗰𝗼𝗺𝗶𝗲𝗻𝘇𝗮 𝗮 𝘂𝘁𝗶𝗹𝗶𝘇𝗮𝗿𝘀𝗲 𝗰𝗼𝗻 𝘂𝗻 𝗽𝗿𝗼𝗽𝗼́𝘀𝗶𝘁𝗼 𝗱𝗶𝗳𝗲𝗿𝗲𝗻𝘁𝗲. El control de los objetos pierde su función inicial en ella. Ahora Milka lo aplica para influir en las interacciones con su familia, 𝘂𝘁𝗶𝗹𝗶𝘇𝗮𝗻𝗱𝗼 𝗲𝘀𝗲 𝗺𝗶𝘀𝗺𝗼 𝗽𝗮𝘁𝗿𝗼́𝗻 𝗰𝗼𝗻𝗱𝘂𝗰𝘁𝘂𝗮𝗹 𝗽𝗮𝗿𝗮 𝗴𝗲𝘀𝘁𝗶𝗼𝗻𝗮𝗿 𝗹𝗮 𝗿𝗲𝗹𝗮𝗰𝗶𝗼́𝗻 𝘀𝗼𝗰𝗶𝗮𝗹 𝗱𝗲𝗻𝘁𝗿𝗼 𝗱𝗲𝗹 𝗵𝗼𝗴𝗮𝗿.
Así, en la convivencia diaria, Milka combina la gestión de los recursos materiales con una forma emergente de controlar el acceso, la distancia o la interacción que mantiene con cada miembro de la familia.
📌¿𝗤𝘂𝗲́ 𝗲𝘀𝘁𝗮́ 𝗼𝗰𝘂𝗿𝗿𝗶𝗲𝗻𝗱𝗼 𝗿𝗲𝗮𝗹𝗺𝗲𝗻𝘁𝗲 𝗰𝗼𝗻 𝗠𝗶𝗹𝗸𝗮?
𝘓𝘦𝘤𝘵𝘶𝘳𝘢 𝘤𝘰𝘯𝘥𝘶𝘤𝘵𝘶𝘢𝘭 𝘥𝘦𝘭 𝘤𝘢𝘴𝘰.
Milka no está mostrando una conducta aislada ni puntual. Lo que vemos 𝗲𝘀 𝘂𝗻 𝗰𝗼𝗻𝗷𝘂𝗻𝘁𝗼 𝗰𝗼𝗵𝗲𝗿𝗲𝗻𝘁𝗲 𝗱𝗲 𝗽𝗮𝘁𝗿𝗼𝗻𝗲𝘀 𝗾𝘂𝗲, 𝗼𝗯𝘀𝗲𝗿𝘃𝗮𝗱𝗼𝘀 𝗱𝗲 𝗺𝗮𝗻𝗲𝗿𝗮 𝗰𝗼𝗻𝗷𝘂𝗻𝘁𝗮, 𝗱𝗲𝘀𝗰𝗿𝗶𝗯𝗲𝗻 𝘂𝗻 𝗽𝗿𝗼𝗰𝗲𝘀𝗼 𝗰𝗹𝗮𝗿𝗼:
"𝗣𝗿𝗶𝗺𝗲𝗿𝗼 𝗮𝗽𝗮𝗿𝗲𝗰𝗲 𝗲𝗹 𝗰𝗼𝗻𝘁𝗿𝗼𝗹 𝗱𝗲 𝗿𝗲𝗰𝘂𝗿𝘀𝗼𝘀, 𝗱𝗲𝘀𝗽𝘂𝗲́𝘀 𝘀𝗲 𝗲𝘀𝘁𝗮𝗯𝗶𝗹𝗶𝘇𝗮, 𝘆 𝗳𝗶𝗻𝗮𝗹𝗺𝗲𝗻𝘁𝗲 𝗲𝘀𝗲 𝗺𝗶𝘀𝗺𝗼 𝘀𝗶𝘀𝘁𝗲𝗺𝗮 𝗰𝗼𝗻𝗱𝘂𝗰𝘁𝘂𝗮𝗹 𝘀𝗲 𝗲𝘅𝘁𝗶𝗲𝗻𝗱𝗲 𝗮 𝗹𝗮𝘀 𝗶𝗻𝘁𝗲𝗿𝗮𝗰𝗰𝗶𝗼𝗻𝗲𝘀 𝘀𝗼𝗰𝗶𝗮𝗹𝗲𝘀 𝗾𝘂𝗲 𝗺𝗮𝗻𝘁𝗶𝗲𝗻𝗲 𝗰𝗼𝗻 𝘀𝘂 𝗳𝗮𝗺𝗶𝗹𝗶𝗮."
𝗘𝗹 𝗽𝘂𝗻𝘁𝗼 𝗱𝗲 𝗽𝗮𝗿𝘁𝗶𝗱𝗮 𝗲𝘀 𝘀𝗲𝗻𝗰𝗶𝗹𝗹𝗼:
Milka ha aprendido que determinados objetos tienen un valor especial dentro del hogar. No es un aprendizaje consciente o estratégico. Es un proceso lento, casi siempre inadvertido, que ocurre cuando el perro identifica que el acceso a ciertos ítems —comida, ropa, mandos, zapatillas— genera tensión, expectativa o acciones repetidas por parte de los humanos.
Con el tiempo, ese patrón se consolida. Milka utiliza posiciones corporales defensivas, bloqueo, desplazamiento del objeto o amenazas de baja intensidad para mantener el control sobre aquello que considera valioso. Y en ocasiones, cuando alguien intenta recuperar uno de esos objetos, aparece agresión dirigida a los miembros de la familia.
𝗟𝗼 𝗿𝗲𝗹𝗲𝘃𝗮𝗻𝘁𝗲 𝗻𝗼 𝗲𝘀 𝗲𝗹 𝗼𝗯𝗷𝗲𝘁𝗼.
"𝘌𝘴 𝘭𝘢 𝘧𝘶𝘯𝘤𝘪𝘰́𝘯 𝘦𝘮𝘰𝘤𝘪𝘰𝘯𝘢𝘭 𝘺 𝘴𝘰𝘤𝘪𝘢𝘭 𝘲𝘶𝘦 𝘦𝘴𝘦 𝘤𝘰𝘮𝘱𝘰𝘳𝘵𝘢𝘮𝘪𝘦𝘯𝘵𝘰 𝘦𝘴𝘵𝘢́ 𝘤𝘶𝘮𝘱𝘭𝘪𝘦𝘯𝘥𝘰 𝘱𝘢𝘳𝘢 𝘦𝘭𝘭𝘢."
Con el paso de los meses, 𝗲𝗹 𝗿𝗲𝗽𝗲𝗿𝘁𝗼𝗿𝗶𝗼 𝗱𝗲 𝗠𝗶𝗹𝗸𝗮 𝗱𝗲𝗷𝗮 𝗱𝗲 𝗮𝗰𝘁𝗶𝘃𝗮𝗿𝘀𝗲 𝘂́𝗻𝗶𝗰𝗮𝗺𝗲𝗻𝘁𝗲 𝗮𝗻𝘁𝗲 𝗼𝗯𝗷𝗲𝘁𝗼𝘀 𝗳𝗶́𝘀𝗶𝗰𝗼𝘀. Empieza a aparecer en situaciones más amplias: cuando un miembro de la familia se acerca, cuando la atención del tutor cambia de foco, o 𝗰𝘂𝗮𝗻𝗱𝗼 𝘂𝗻𝗮 𝗶𝗻𝘁𝗲𝗿𝗮𝗰𝗰𝗶𝗼́𝗻 𝗻𝗼 𝘀𝗲 𝗮𝗷𝘂𝘀𝘁𝗮 𝗮 𝗹𝗼 𝗾𝘂𝗲 𝗲𝗹𝗹𝗮 𝗵𝗮 𝗮𝗽𝗿𝗲𝗻𝗱𝗶𝗱𝗼 𝗮 𝗲𝘀𝗽𝗲𝗿𝗮𝗿.
𝗔𝗾𝘂𝗶́ 𝘀𝘂𝗿𝗴𝗲 𝘂𝗻 𝗺𝗮𝘁𝗶𝘇 𝗶𝗺𝗽𝗼𝗿𝘁𝗮𝗻𝘁𝗲: si la situación no progresa en los términos que Milka considera “correctos”, ya no espera a que alguien intente retirarle el objeto. 𝗘𝘀 𝗲𝗹𝗹𝗮 𝗾𝘂𝗶𝗲𝗻 𝗮𝗰𝗲𝗿𝗰𝗮 𝗱𝗲𝗹𝗶𝗯𝗲𝗿𝗮𝗱𝗮𝗺𝗲𝗻𝘁𝗲 𝗲𝗹 𝗼𝗯𝗷𝗲𝘁𝗼 𝗮 𝗹𝗼𝘀 𝗿𝗲𝘀𝗽𝗼𝗻𝘀𝗮𝗯𝗹𝗲𝘀, 𝗯𝘂𝘀𝗰𝗮𝗻𝗱𝗼 𝗽𝗿𝗼𝘃𝗼𝗰𝗮𝗿 𝗹𝗮 𝗿𝗲𝘀𝗽𝘂𝗲𝘀𝘁𝗮 𝗵𝗮𝗯𝗶𝘁𝘂𝗮𝗹. De esta forma, fuerza la secuencia de interacción que conoce, 𝗮𝗰𝘁𝗶𝘃𝗮 𝗲𝗹 𝗽𝗮𝘁𝗿𝗼́𝗻 𝗿𝗲𝗹𝗮𝗰𝗶𝗼𝗻𝗮𝗹 𝗮𝗽𝗿𝗲𝗻𝗱𝗶𝗱𝗼 y recupera la predictibilidad que ha construido a partir de experiencias previas. Lo que comenzó como una conducta de defensa ante un recurso material 𝘀𝗲 𝗰𝗼𝗻𝘃𝗶𝗲𝗿𝘁𝗲 𝗮𝘀𝗶́ 𝗲𝗻 𝘂𝗻𝗮 𝗵𝗲𝗿𝗿𝗮𝗺𝗶𝗲𝗻𝘁𝗮 𝗽𝗮𝗿𝗮 𝗿𝗲𝗴𝘂𝗹𝗮𝗿 𝗹𝗮 𝗶𝗻𝘁𝗲𝗿𝗮𝗰𝗰𝗶𝗼́𝗻, 𝗱𝗲𝗳𝗶𝗻𝗶𝗿 𝗲𝗹 𝗿𝗶𝘁𝗺𝗼 𝗱𝗲𝗹 𝗰𝗼𝗻𝘁𝗮𝗰𝘁𝗼 𝘆 𝗼𝗯𝘁𝗲𝗻𝗲𝗿 𝗰𝗼𝗻𝘁𝗿𝗼𝗹 𝗰𝗼𝗻𝘁𝗲𝘅𝘁𝘂𝗮𝗹 𝘀𝗼𝗯𝗿𝗲 𝗹𝗼 𝗾𝘂𝗲 𝗼𝗰𝘂𝗿𝗿𝗲 𝗮 𝘀𝘂 𝗮𝗹𝗿𝗲𝗱𝗲𝗱𝗼𝗿.
"𝗘𝗻 𝗲𝘀𝘁𝗲 𝗽𝘂𝗻𝘁𝗼, 𝗲𝗹 𝗰𝗼𝗺𝗽𝗼𝗿𝘁𝗮𝗺𝗶𝗲𝗻𝘁𝗼 𝗱𝗲𝗷𝗮 𝗱𝗲 𝗲𝘀𝘁𝗮𝗿 𝗹𝗶𝗺𝗶𝘁𝗮𝗱𝗼 𝗮𝗹 𝗰𝘂𝗲𝗻𝗰𝗼 𝗼 𝗮𝗹 𝗺𝗮𝗻𝗱𝗼 𝗮 𝗱𝗶𝘀𝘁𝗮𝗻𝗰𝗶𝗮."
𝗦𝘂 𝗳𝘂𝗻𝗰𝗶𝗼́𝗻 𝘀𝗲 𝗵𝗮 𝗮𝗺𝗽𝗹𝗶𝗮𝗱𝗼: Milka utiliza ese repertorio para gestionar la relación social dentro de la familia.
𝗡𝗼 𝘀𝗲 𝘁𝗿𝗮𝘁𝗮 𝗱𝗲 “𝗱𝗼𝗺𝗶𝗻𝗮𝗻𝗰𝗶𝗮”, 𝗻𝗶 𝗱𝗲 𝗮𝘀𝘂𝗺𝗶𝗿 𝘂𝗻 𝗿𝗼𝗹 𝗷𝗲𝗿𝗮́𝗿𝗾𝘂𝗶𝗰𝗼.
Lo que ocurre es que un aprendizaje inicial —defender un recurso— se ha ido fortaleciendo y generalizando hasta convertirse en una herramienta para regular el entorno social.
"𝗨𝗻 𝗽𝗿𝗼𝗰𝗲𝘀𝗼 𝗾𝘂𝗲, 𝘀𝗶 𝗻𝗼 𝘀𝗲 𝗶𝗻𝘁𝗲𝗿𝘃𝗶𝗲𝗻𝗲, 𝘁𝗶𝗲𝗻𝗱𝗲 𝗮 𝗵𝗮𝗰𝗲𝗿𝘀𝗲 𝗰𝗮𝗱𝗮 𝘃𝗲𝘇 𝗺𝗮́𝘀 𝗲𝘀𝘁𝗮𝗯𝗹𝗲 𝘆 𝗽𝗿𝗲𝗱𝗲𝗰𝗶𝗯𝗹𝗲."
𝗔𝘀𝗶́ 𝗲𝘀 𝗰𝗼𝗺𝗼 𝗠𝗶𝗹𝗸𝗮 𝗵𝗮 𝗹𝗹𝗲𝗴𝗮𝗱𝗼 𝗮 𝗲𝘀𝘁𝗲 𝗽𝘂𝗻𝘁𝗼:
por acumulación, por refuerzo involuntario y por la eficacia que ha tenido este patrón para controlar aquello que, para ella, es importante.
📌¿𝗤𝘂𝗲́ 𝘁𝗶𝗽𝗼 𝗱𝗲 𝗶𝗻𝘁𝗲𝗿𝘃𝗲𝗻𝗰𝗶𝗼́𝗻 𝘁𝗲́𝗰𝗻𝗶𝗰𝗮 𝘀𝗲 𝘂𝘁𝗶𝗹𝗶𝘇𝗮 𝗲𝗻 𝗲𝘁𝗼𝗹𝗼𝗴𝗶́𝗮 𝗮𝗽𝗹𝗶𝗰𝗮𝗱𝗮 𝗲𝗻 𝘂𝗻 𝗰𝗮𝘀𝗼 𝗰𝗼𝗺𝗼 𝗲𝗹 𝗱𝗲 𝗠𝗶𝗹𝗸𝗮?
La intervención no se basa en corregir la conducta superficial, sino en modificar las condiciones funcionales que la sostienen. En un caso como el de Milka, el trabajo etológico combina tres pilares principales:
🧩𝟭. 𝗥𝗲𝗰𝗼𝗻𝘀𝘁𝗿𝘂𝗰𝗰𝗶𝗼́𝗻 𝗱𝗲𝗹 𝗰𝗼𝗻𝘁𝗿𝗼𝗹 𝗲𝗺𝗼𝗰𝗶𝗼𝗻𝗮𝗹 𝘆 𝗿𝗲𝗱𝘂𝗰𝗰𝗶𝗼́𝗻 𝗱𝗲 𝗹𝗮 𝗮𝗰𝘁𝗶𝘃𝗮𝗰𝗶𝗼́𝗻
Antes de intervenir sobre el comportamiento en sí, es necesario desactivar la carga emocional que alimenta el patrón. Para ello se aplican procedimientos como:
𝗖𝗼𝗻𝘁𝗿𝗮𝗰𝗼𝗻𝗱𝗶𝗰𝗶𝗼𝗻𝗮𝗺𝗶𝗲𝗻𝘁𝗼 𝗲𝗺𝗼𝗰𝗶𝗼𝗻𝗮𝗹: asociar la presencia del humano, la manipulación o la retirada del recurso con estímulos positivos, reduciendo la amenaza percibida.
𝗗𝗲𝘀𝗲𝗻𝘀𝗶𝗯𝗶𝗹𝗶𝘇𝗮𝗰𝗶𝗼́𝗻 𝘀𝗶𝘀𝘁𝗲𝗺𝗮́𝘁𝗶𝗰𝗮: exponer al perro, de forma gradual y controlada, a los contextos que disparan el patrón para disminuir la reactividad y normalizar la respuesta.
𝘌𝘭 𝘰𝘣𝘫𝘦𝘵𝘪𝘷𝘰 𝘦𝘯 𝘦𝘴𝘵𝘢 𝘧𝘢𝘴𝘦 𝘯𝘰 𝘦𝘴 “𝘲𝘶𝘪𝘵𝘢𝘳 𝘦𝘭 𝘤𝘰𝘮𝘱𝘰𝘳𝘵𝘢𝘮𝘪𝘦𝘯𝘵𝘰”, 𝘴𝘪𝘯𝘰 𝘳𝘦𝘤𝘰𝘯𝘧𝘪𝘨𝘶𝘳𝘢𝘳 𝘭𝘢 𝘳𝘦𝘴𝘱𝘶𝘦𝘴𝘵𝘢 𝘦𝘮𝘰𝘤𝘪𝘰𝘯𝘢𝘭 𝘲𝘶𝘦 𝘭𝘰 𝘱𝘳𝘦𝘤𝘦𝘥𝘦.
🧩𝟮. 𝗜𝗻𝘁𝗲𝗿𝘃𝗲𝗻𝗰𝗶𝗼𝗻𝗲𝘀 𝗰𝗲𝗻𝘁𝗿𝗮𝗱𝗮𝘀 𝗲𝗻 𝗹𝗮 𝗳𝘂𝗻𝗰𝗶𝗼𝗻𝗮𝗹𝗶𝗱𝗮𝗱 𝘀𝗼𝗰𝗶𝗮𝗹 𝗱𝗲𝗹 𝗰𝗼𝗺𝗽𝗼𝗿𝘁𝗮𝗺𝗶𝗲𝗻𝘁𝗼
Cuando el repertorio agonístico se ha ampliado hacia el control social, como ocurre con Milka, se trabajan protocolos orientados a:
𝗗𝗲𝘃𝗼𝗹𝘃𝗲𝗿 𝗽𝗿𝗲𝗱𝗶𝗰𝘁𝗶𝗯𝗶𝗹𝗶𝗱𝗮𝗱 𝗮𝗹 𝗲𝗻𝘁𝗼𝗿𝗻𝗼: establecer rituales claros y consistentes que el perro no necesite provocar mediante conductas agonísticas.
𝗥𝗲𝗱𝘂𝗰𝗶𝗿 𝗹𝗮 𝗲𝗳𝗶𝗰𝗮𝗰𝗶𝗮 𝗱𝗲𝗹 𝗰𝗼𝗺𝗽𝗼𝗿𝘁𝗮𝗺𝗶𝗲𝗻𝘁𝗼 𝗽𝗿𝗼𝗯𝗹𝗲𝗺𝗮: impedir que las conductas de control obtengan el resultado que buscan (por ejemplo, iniciar la interacción), sin recurrir a confrontación ni castigo.
𝗥𝗲𝗳𝗼𝗿𝘇𝗮𝗿 𝗮𝗹𝘁𝗲𝗿𝗻𝗮𝘁𝗶𝘃𝗮𝘀 que permitan a Milka solicitar interacción o regular distancia sin recurrir al repertorio defensivo original.
𝘌𝘴𝘵𝘢 𝘧𝘢𝘴𝘦 𝘦𝘴 𝘤𝘳𝘶𝘤𝘪𝘢𝘭 𝘱𝘢𝘳𝘢 𝘳𝘰𝘮𝘱𝘦𝘳 𝘭𝘢 𝘤𝘢𝘥𝘦𝘯𝘢 𝘧𝘶𝘯𝘤𝘪𝘰𝘯𝘢𝘭:
𝘴𝘪 𝘦𝘭 𝘤𝘰𝘮𝘱𝘰𝘳𝘵𝘢𝘮𝘪𝘦𝘯𝘵𝘰 𝘥𝘦𝘫𝘢 𝘥𝘦 𝘱𝘳𝘰𝘥𝘶𝘤𝘪𝘳 𝘦𝘭 𝘦𝘧𝘦𝘤𝘵𝘰 𝘴𝘰𝘤𝘪𝘢𝘭 𝘲𝘶𝘦 𝘔𝘪𝘭𝘬𝘢 𝘣𝘶𝘴𝘤𝘢, 𝘱𝘪𝘦𝘳𝘥𝘦 𝘷𝘢𝘭𝘰𝘳 𝘪𝘯𝘴𝘵𝘳𝘶𝘮𝘦𝘯𝘵𝘢𝘭.
🧩𝟯. 𝗘𝗻𝘁𝗿𝗲𝗻𝗮𝗺𝗶𝗲𝗻𝘁𝗼 𝗱𝗲 𝗻𝘂𝗲𝘃𝗮𝘀 𝗰𝗼𝗺𝗽𝗲𝘁𝗲𝗻𝗰𝗶𝗮𝘀 𝘆 𝘁𝗿𝗮𝗻𝘀𝗳𝗲𝗿𝗲𝗻𝗰𝗶𝗮 𝗱𝗲 𝗮𝗴𝗲𝗻𝗰𝗶𝗮
Milka ha llegado a este punto porque su comportamiento le ha funcionado.
La intervención debe ofrecer nuevas vías de control, nuevas formas de comunicación y nuevas expectativas sociales.
𝗣𝗮𝗿𝗮 𝗲𝗹𝗹𝗼 𝘀𝗲 𝗲𝗻𝘁𝗿𝗲𝗻𝗮𝗻:
𝗖𝗼𝗺𝗽𝗼𝗿𝘁𝗮𝗺𝗶𝗲𝗻𝘁𝗼𝘀 𝗮𝗹𝘁𝗲𝗿𝗻𝗮𝘁𝗶𝘃𝗼𝘀 𝘃𝗼𝗹𝘂𝗻𝘁𝗮𝗿𝗶𝗼𝘀: acudir, retirarse, soltar objetos, ir al lugar de descanso, esperar turnos, etc.
𝗦𝗲𝗻̃𝗮𝗹𝗲𝘀 𝘀𝗼𝗰𝗶𝗮𝗹𝗲𝘀 𝗰𝗹𝗮𝗿𝗮𝘀 𝘆 𝗰𝗼𝗻𝘀𝗶𝘀𝘁𝗲𝗻𝘁𝗲𝘀 por parte de los responsables, que reduzcan la incertidumbre.
𝗘𝘀𝘁𝗿𝗮𝘁𝗲𝗴𝗶𝗮𝘀 𝗱𝗲 𝗮𝘂𝘁𝗼𝗻𝗼𝗺𝗶́𝗮 𝘆 𝗲𝗹𝗲𝗰𝗰𝗶𝗼́𝗻: permitir que Milka decida iniciar o detener ciertas interacciones; aumentar su capacidad de agencia reduce la necesidad de mecanismos defensivos.
𝘌𝘴𝘵𝘢 𝘦𝘴 𝘶𝘯𝘢 𝘥𝘦 𝘭𝘢𝘴 𝘱𝘢𝘳𝘵𝘦𝘴 𝘮𝘢́𝘴 𝘪𝘮𝘱𝘰𝘳𝘵𝘢𝘯𝘵𝘦𝘴:
𝘤𝘶𝘢𝘯𝘥𝘰 𝘦𝘭 𝘱𝘦𝘳𝘳𝘰 𝘵𝘪𝘦𝘯𝘦 𝘮𝘢́𝘴 𝘤𝘰𝘯𝘵𝘳𝘰𝘭 𝘳𝘦𝘢𝘭, 𝘥𝘦𝘫𝘢 𝘥𝘦 𝘣𝘶𝘴𝘤𝘢𝘳 𝘤𝘰𝘯𝘵𝘳𝘰𝘭 𝘧𝘶𝘯𝘤𝘪𝘰𝘯𝘢𝘭 𝘢 𝘵𝘳𝘢𝘷𝘦́𝘴 𝘥𝘦 𝘱𝘢𝘵𝘳𝘰𝘯𝘦𝘴 𝘱𝘳𝘰𝘣𝘭𝘦𝘮𝘢́𝘵𝘪𝘤𝘰𝘴.
🧩𝟰. 𝗣𝗿𝗲𝘃𝗲𝗻𝗰𝗶𝗼́𝗻 𝗱𝗲 𝗿𝗲𝗰𝗮𝗶́𝗱𝗮𝘀 𝗺𝗲𝗱𝗶𝗮𝗻𝘁𝗲 𝗰𝗼𝗻𝘁𝗿𝗼𝗹 𝗱𝗲𝗹 𝗲𝗻𝘁𝗼𝗿𝗻𝗼 𝘆 𝗮𝗻𝘁𝗶𝗰𝗶𝗽𝗮𝗰𝗶𝗼́𝗻
𝗘𝗹 𝘂́𝗹𝘁𝗶𝗺𝗼 𝘁𝗿𝗮𝗺𝗼 𝗱𝗲 𝗹𝗮 𝗶𝗻𝘁𝗲𝗿𝘃𝗲𝗻𝗰𝗶𝗼́𝗻 𝘀𝗲 𝗼𝗿𝗶𝗲𝗻𝘁𝗮 𝗮 𝗲𝘃𝗶𝘁𝗮𝗿 𝗾𝘂𝗲 𝗲𝗹 𝗿𝗲𝗽𝗲𝗿𝘁𝗼𝗿𝗶𝗼 𝘃𝘂𝗲𝗹𝘃𝗮 𝗮 𝗰𝗼𝗻𝘀𝗼𝗹𝗶𝗱𝗮𝗿𝘀𝗲:
👉 Gestión proactiva de objetos que actúan como disparadores.
👉 Revisión de rutinas familiares que refuercen, sin querer, el comportamiento.
👉 Seguimiento del nivel emocional del perro en situaciones nuevas o ambiguas.
👉 Consolidación de los nuevos patrones sociales adquiridos.
𝘌𝘭 𝘰𝘣𝘫𝘦𝘵𝘪𝘷𝘰 𝘯𝘰 𝘦𝘴 𝘴𝘰𝘭𝘰 𝘳𝘦𝘴𝘰𝘭𝘷𝘦𝘳 𝘦𝘭 𝘱𝘳𝘰𝘣𝘭𝘦𝘮𝘢 𝘢𝘤𝘵𝘶𝘢𝘭, 𝘴𝘪𝘯𝘰 𝘦𝘷𝘪𝘵𝘢𝘳 𝘲𝘶𝘦 𝘭𝘢 𝘤𝘰𝘯𝘥𝘶𝘤𝘵𝘢 𝘷𝘶𝘦𝘭𝘷𝘢 𝘢 𝘦𝘯𝘤𝘰𝘯𝘵𝘳𝘢𝘳 𝘶𝘵𝘪𝘭𝘪𝘥𝘢𝘥 𝘥𝘦𝘯𝘵𝘳𝘰 𝘥𝘦 𝘭𝘢 𝘦𝘴𝘵𝘳𝘶𝘤𝘵𝘶𝘳𝘢 𝘴𝘰𝘤𝘪𝘢𝘭 𝘥𝘦𝘭 𝘩𝘰𝘨𝘢𝘳.
“𝗘𝗹 𝗦𝗲𝗻𝘁𝗶𝗱𝗼 𝗱𝗲 𝗡𝘂𝗲𝘀𝘁𝗿𝗼 𝗧𝗿𝗮𝗯𝗮𝗷𝗼"
📍 La intervención en etología aplicada 𝗻𝗼 𝘀𝗲 𝗯𝗮𝘀𝗮 𝗲𝗻 𝘀𝘂𝗽𝗿𝗶𝗺𝗶𝗿 𝗹𝗮 𝗰𝗼𝗻𝗱𝘂𝗰𝘁𝗮, 𝘀𝗶𝗻𝗼 𝗲𝗻 𝗺𝗼𝗱𝗶𝗳𝗶𝗰𝗮𝗿 𝗹𝗮 𝗲𝗺𝗼𝗰𝗶𝗼́𝗻, 𝗹𝗮 𝗳𝘂𝗻𝗰𝗶𝗼𝗻𝗮𝗹𝗶𝗱𝗮𝗱 𝘆 𝗹𝗮𝘀 𝗰𝗼𝗻𝗱𝗶𝗰𝗶𝗼𝗻𝗲𝘀 𝘀𝗼𝗰𝗶𝗮𝗹𝗲𝘀 𝗾𝘂𝗲 𝗹𝗮 𝗺𝗮𝗻𝘁𝗶𝗲𝗻𝗲𝗻.
📍 El trabajo integra regulación emocional, reestructuración funcional, construcción de alternativas y transferencia de agencia.
𝗖𝗼𝗼𝗸, 𝗣., 𝗣𝗿𝗶𝗰𝗵𝗮𝗿𝗱, 𝗔., 𝗦𝗽𝗶𝘃𝗮𝗸, 𝗠., & 𝗕𝗲𝗿𝗻𝘀, 𝗚. 𝗦. (𝟮𝟬𝟭𝟴).
“Jealousy in dogs? Evidence from brain imaging.”
Animal Sentience, 3(22).
DOI: 10.51291/2377-7478.1319
ISSN: 2377-7478
➡️ Estudio clave sobre emociones sociales, amenaza al recurso social y activación de la amígdala.
𝗞𝗮𝗿𝗹, 𝗦., 𝗔𝗻𝗱𝗲𝗿𝗹𝗲, 𝗞., 𝗩𝗼̈𝗹𝘁𝗲𝗿, 𝗖. 𝗝., & 𝗩𝗶𝗿𝗮́𝗻𝘆𝗶, 𝗭. (𝟮𝟬𝟮𝟮).
“Pet dogs’ behavioural reaction to their caregiver’s interactions with a third party: Join in or interrupt?”
Animals, 12(12), 1574.
DOI: 10.3390/ani12121574
ISSN: 2076-2615
➡️ Estudio sobre interposición, bloqueo y control de interacciones sociales.
𝗠𝗰𝗚𝗲𝘁𝗿𝗶𝗰𝗸, 𝗝., & 𝗥𝗮𝗻𝗴𝗲, 𝗙. (𝟮𝟬𝟭𝟵).
“A shared food source is not necessary to elicit inequity aversion in dogs.”
Frontiers in Psychology, 10, 413.
DOI: 10.3389/fpsyg.2019.00413
ISSN: 1664-1078
➡️ Relevante para comprender frustración social, inequidad y protestas conductuales.
𝗦𝗵𝗲𝘁𝘁𝗹𝗲𝘄𝗼𝗿𝘁𝗵, 𝗦. 𝗝. (𝟭𝟵𝟳𝟰).
“Function, causation, evolution, and development of behavior.”
Perspectives in Biology and Medicine, 17(4), 597–630.
DOI: 10.1353/pbm.1974.0023
ISSN: (no identificado en bases abiertas)
➡️ Texto fundamental sobre los niveles funcionales de análisis de la conducta (Marco que aplica al caso Milka).