15/09/2025
Si bien es cierto es su trabajo, pero...
Hoy, en un día que debería ser de descanso y alegría para muchos, la tristeza y el desasosiego se han apoderado de las calles de Guatemala. En esta jornada feriada, donde las familias se reúnen para compartir momentos de felicidad, la realidad nos golpea con crudeza: el estado de nuestras calles ha impedido que cientos de ciudadanos disfruten de la esperanza que trae un día libre.
Al amanecer, la Plaza Obelisco y las avenidas aledañas se presentaron llenas de bolsas de agua vacías, un triste recordatorio de las festividades que no lograron realizarse. La imagen es desoladora; cada bolsa es un eco de actividades interrumpidas, de sueños que se desvanecieron ante la adversidad. Las risas y los abrazos de los seres queridos se ven opacados por el cansancio y el esfuerzo de aquellos que luchan a diario para mantener nuestra ciudad limpia y habitable.
Desde las 4 de la mañana, el personal de limpieza y mantenimiento, con dedicación y esfuerzo, ha estado recogiendo la basura que ensombrece nuestras calles. Su labor, aunque a menudo invisibilizada, es un testimonio del compromiso y la resiliencia de quienes no se detienen ante las dificultades. Ellos son los verdaderos héroes de la comunidad, enfrentando el desánimo mientras luchan por un entorno más limpio y digno.
Este día, más que lamentar lo que no se puede cambiar, es un llamado a la reflexión. Debemos unirnos como ciudadanos, no solo para celebrar nuestras festividades, sino para cuidar y proteger nuestro hogar: Guatemala. Cada bolsa recogida es un paso hacia adelante, un símbolo de que, aún en la adversidad, hay esperanza. Que nuestra tristeza se transforme en un impulso para construir un futuro mejor.
Hoy nos hemos visto ante la vulnerabilidad de nuestra realidad, pero también ante la fortaleza de nuestra gente. Recordemos que, aunque las calles estén llenas de desechos, la verdadera riqueza de Guatemala resides en su gente. Juntos, podemos hacer la diferencia. Juntos, podemos reconstruir, no solo las calles, sino la esperanza de un país mejor.