04/04/2024
Hay periodos en la vida en que nos va de la fregada.
A veces, duran días. A veces, meses o años.
Pareciera que traemos una nubecita gris encima de nosotros (no dudo que todos hayamos pasado temporadas así).
Y tan solo de pensar en ese montón de cosas negativas, crees que tu vida es un desastre.
Ves a tu alrededor y te preguntas por qué a los demás les va tan bien.
Si estás pasando por un lapso así, , te voy a hacer un gran favor con la reflexión de hoy:
Basta de decir que la vida es dura.
Para empezar, estás observando solo la magnitud de lo que alcanzas a ver, lo cual es una pequeña burbuja dentro del mundo gigantesco en el que vivimos.
Hay millones de personas que no estás considerando. Y no tomar en cuenta la totalidad implica que estás creyendo una falacia.
Tu vida no es tan mala como piensas, si la comparas con la de todos los que habitamos este planeta.
Cada vez que crees eso, estás siendo presa de una trampa cerebral que te hace ver solo un fragmento aislado de la realidad.
Así que, respira. En lugar de quejarte, levántate y pelea, que no todo está perdido.
Tú tienes el poder de dirigir tus pensamientos para decidir cómo guiarás tu vida. Nadie más lo puede hacer por ti.
Si quieres hundirte en la depresión y perderte todo lo que puedes lograr con un poquito de esfuerzo y persistencia, allá tú.
Pero si quieres tener éxito en la vida y en el amor (lo cual asumo porque aquí estás leyendo esto), no lo vas a conseguir en tu papel de víctima.
Tienes 2 caminos frente a ti: compadecerte de ti mismo o extraer lo mejor que tienes dentro para seguir luchando por eso que más anhelas. Tú decides.
Si no tienes fuerza para continuar, por lo menos, hazlo por curiosidad.
Autor_Carlos Rizo