29/04/2025
Nunca había amado a alguien tanto como te amo a ti. Estas palabras resuenan en cada rincón de mi ser, porque lo que siento por ti es un amor profundo y auténtico que desafía todas mis experiencias pasadas. No me importa que sea "malo" amarte en exceso, porque para mí, ese exceso no es un defecto, sino una bendición. Disfruto cada instante de este amor, y lo haré siempre, porque amar es un acto de entrega, y estoy completamente dispuesto a darlo todo por ti.
Si alguien llegara a preguntarme cuál fue mi primer amor, no dudaría en pronunciar tu nombre. A pesar de que tú no hayas sido mi primer amor, eres el primero en hacerme sentir este amor tan grande que arde en mi interior. Recuerdo el momento en que me di cuenta de que lo que sentía por ti era diferente, más intenso y más real que cualquier otra emoción que había experimentado antes. Con cada sonrisa tuya, con cada palabra compartida, mi corazón comenzó a despertar de un letargo del que ni siquiera sabía que estaba atrapado.
Este amor no se parece a nada que haya sentido antes. Es un fuego que calienta mi alma y me llena de luz. Cada día, a tu lado, descubro nuevas razones para admirarte y amarte aún más. Tus sueños se convierten en los míos, y cada risa compartida se suma a una banda sonora que quiero escuchar para siempre. En un mundo donde a menudo se nos dice que el amor está destinado a ser complicado, tú me has enseñado que, en realidad, puede ser simple y puro.
Es cierto que el amor a veces trae consigo riesgos y vulnerabilidades. Te amo de una forma tan visceral que me arriesgo a perderme en ti. Pero, curiosamente, al mismo tiempo, me encuentro a mí mismo en este amor. Me has mostrado que amarte no significa perder mi identidad, sino ampliar la mía al abrazar la nuestra. Juntos hemos creado un espacio seguro donde podemos ser auténticos, donde nuestras imperfecciones se entrelazan y crean una belleza única.
No hay temor en mi corazón, solo una profunda confianza en lo que compartimos. A veces, me detengo a reflexionar sobre cómo cada uno de nuestros momentos ha tejido un tapiz vibrante de recuerdos. Desde las largas charlas hasta las tardes de silencio compartido, cada instante se ha convertido en un ladrillo que sostiene el fundamento de nuestro amor. Estoy agradecido por cada rayo de sol y cada nube que hemos enfrentado juntos, porque cada experiencia nos ha llevado a este punto, donde el amor es una sensación palpable que nos envuelve.
Y aunque este amor que siento por ti puede ser considerado excesivo por algunos, para mí, es un regalo. Amarte es como respirar: es natural, es necesario, y no puedo imaginar mi vida sin ti. Sé que, pase lo que pase, este sentimiento se mantendrá presente en mi corazón. Por eso, no dudaré en gritarlo al mundo: "Te amo sin límites, sin reservas."
Así que aquí estoy, dispuesto a navegar cada ola de esta vida contigo, a enfrentar cada desafío de la mano, y a disfrutar de cada instante de felicidad y plenitud. Porque este amor, que se siente como un primer amor, aunque haya llegado después, es eterno en su esencia. Nunca dejaré de amarte, nunca dejaré de sentir, y siempre estaré aquí, listo para vivir cada día al máximo a tu lado.